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LeBron James es una marca en sí misma. Uno de los mejores jugadores de la historia de la NBA y del básquet mundial genera atracción, es uno de las personalidades con mayor cantidad de fanáticos y todo lo que toca, lo vuelve en tendencia. En la temporada 2024/25 cumplirá un sueño: jugar con su hijo. Pese a las críticas a su alrededor, Los Angeles Lakers lo eligió en la posición 55 del draft de 2024.

Pero el hijo de LeBron ya comenzó a tener su propio fanatismo y, en una reciente subasta, la camiseta que llevó en su primer partido de la Summer League se vendió por 38.400 dólares cuando, según las previsiones, su precio oscilaría entre los 6.000 y los 10.000. La del número uno del draft, el francés Zaccharie Risacher, se vendió por 3.300 dólares, diez veces menos. La de Reed Sheppard, número 3, fue la segunda de mayor valor con un precio de 15.600 dólares.

Bronny debutó el 6 de julio en una derrota por 108-94 ante Sacramento, anotando 4 puntos con 2 de 9 tiros en 21 minutos de juego. El contrato que firmó el hijo de LeBorn con el equipo de su padre es de 4 temporadas a cambio de 7.9 millones de dólares. En este curso, por ejemplo, Bronny se embolsará 1.157.153 dólares.

En la misma subasta, una camiseta que LeBron usó en un partido de temporada regular el 15 de noviembre de 2023 contra los Kings, en el que tuvo un triple doble, se vendió por 42.000 doólares, solo 3.600 dólares más que la de Bronny.

Como para tomar referencia, la camiseta de debut de la Liga de Verano de Victor Wembanyama se vendió por 62.020 dólares el año pasado y la de su debut en la temporada regular por 762.000 dólares, superando ampliamente las expectativas originales que rondaban los 120.000 dólares.