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Desde el año 2022 que Rusia y Ucrania se encuentran en guerra desde el año 2022 cuando el gobierno presidido por Vladimir Putin ingresó a terreno ucraniano. Desde ese entonces, el deporte ruso se encuentra practicamente eexcluido del plano internacional. En fútbol no pueden competir y no fueron al mundial, en los JJOO solo una parte de los deportistas puede asistir (sin el nombre ni la bandera del país) y en materia de deportes individuales solo algunos pueden competir siempre y cuando no se muestren pro-rusos en la guerra (Daniil Medvedev o Dimitry Bivol por ejemplo).

En el baloncesto también es completa la prohibición que tiene Rusia y en este caso nos vamos a centrar en lo que pasa con el CSKA de Moscú que no puede jugar la Euroliga, siendo el segundo más ganador con 8 detrás del Real Madrid. El club no puede participar de la competición y eso representa una pérdida en el nivel del club que no puede incorporar los jugadores que quiere porque muchos prefieren jugar en un equipo que pueda participar en la mayor competición a nivel clubes del Viejo Continente. 

Sobre como van las negociaciones entre las dos partes, el presidente del CSKA, Andrey Vatutin, expresó lo siguiente: "La Euroliga ha expresado su posición oficial a través de un comunicado: mientras continúen las acciones militares, el regreso es imposible. Sí, echamos mucho de menos estar en la Euroliga. Pero, en mi opinión, la situación actual de la Euroliga es incluso peor que la del CSKA. El torneo no sólo perdió un club importante, sino también un gran mercado."

También mencionó que es imparcial el criterio de la Euroliga al permitir que un equipo de Israel (que también se encuentra en un conflicto bélico), como el Maccabi Tel Aviv pueda jugar: "Son casos diferentes. Cuando se planteó la cuestión, votamos a favor de que el Maccabi siguiera participando en la Euroliga, porque creemos que es lo correcto. Deseo sinceramente a nuestros amigos israelíes un fin rápido y pacífico del conflicto y que puedan jugar tranquilamente sus partidos en casa en Tel Aviv», comentó Vatutin, quien consideró incorrecto asociar al CSKA o a cualquier otro club deportivo con una guerra.