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Luca Vildoza seguramente mañana podrá vivir desde adentro el rugido de un Madison Square Garden repleto que buscará evitar que su equipo quede eliminado a manos de los Hawks (que ganan la serie 3-1), pero no podrá darse el gusto de hacerlo vestido como jugador de los Knicks. 

Como era de esperar, el base no se unirá al equipo que se presente formalmente en cancha y seguirá desde afuera a sus futuros nuevos compañeros, aunque el solo hecho de estar allí significará seguramente un sueño para el hombre criado en Mar del Plata. 

Luca se encuentra actualmente en un departamento que le dio la franquicia para que siga sus entrenamientos particulares con un entrenados colocado por los Knicks, en la zona de White Plains, al norte de Manhattan, que es donde vive la mayoría de los jugadores, ya que allí esta el facility del equipo (la cancha de entrenamiento), y también el aeropuerto desde el que habitualmente se mueven. Allí vivió también, por ejemplo, Pablo Prigioni. 

Vildoza seguirá esta rutina hasta que los Knicks le indiquen lo contrario. Si bien la chance de que el equipo pase a la siguiente ronda todavía está viva y nadie puede asegurar que, en ese caso, Luca no tenga la posibilidad de vestirse, es un hecho que en esta 2020/21 no lo hará y perar tendra los campamentos de petemporada para ser formalmente parte del equipo. En el medio, estará Tokio y otra ilusión más.