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Cuando surgió allá por mediados de los 80, la Liga Nacional inspiraba una pasión que hoy es difícil de entender. El mundo era tan distinto que algo tan revolucionario como la Liga había cambiado por completo la estructura del básquetbol argentino. Por eso pasaron tantos años donde la competencia se consolidó: tenía a todas sus figuras aquí y el nivel crecía temporada tras temporada. 

Eran comienzos con los duelos entre Ferro y Atenas, que luego incorporaron clubes de prestigio a los clásicos de época: GEPU, Boca, Independiente de Pico, Peñarol, Estudiantes de Olavarría, Olimpia de Venado Tuerto. El siglo pasado tuvo duelos de primerísimo nivel, mientras todo en el planeta se iba transformando con Internet, la telefonía celular, la televisión satelital, la chance de ver muchas más cosas en dispositivos más pequeños. Y, además, la ley Bosman que le abrió Europa a los jugadores argentinos. 

Hoy es difícil sostener a los mejores jugadores durante mucho tiempo en el país, y por eso cada vez resulta más complicado romper récords como los de Leo Gutiérrez (10 títulos), Milanesio (7), Campana (7) o Marcos Mata (7). No duran en la Argentina. Por eso estos casos fueron especiales. Marcelo y Pichi jugaron en una época donde nadie se iba afuera, mientras que Leo Gutiérrez prefirió hacer toda su carrera en el país y Mata se fue pero volvió pronto.

Otro caso similar es Penka Aguirre, dueño de una seguidilla que difícilmente alguien tenga a nivel mundial: 7 títulos consecutivos con 3 equipos distintos en dos países diferentes: Quimsa (1), San Lorenzo (5) y Fuerza Regia (México). Su marca quedará atrás luego de que Quimsa o Instituto se coronen campeones. 

Aunque con menor contundencia, también se ha vuelto difícil mantener a los mejores entrenadores, por eso los 6 anillos de Sergio Hernández se ven como algo lejano entre sus pares de conseguir. De hecho, sus seguidores en la tabla o ya no dirigen (Lamas 5, Garrone 3, Seguí 3) o no están en el país (Magnano 4). De los que sí siguen y terminaron la última temporada, solo Gonzalo García (2 veces), ganó alguna vez la Liga. ¿Un dato más fuerte todavía? De los 20 que terminaron la 2021/22, solo 3 alguna vez jugaron una final: García (4), González (4) y Demti (1). 

En cuanto a los equipos, con la caída de San Lorenzo en desgracia tras ganar 5 anillos en fila, el récord de Atenas (9, aunque el último bien lejano, allá por el 2009) parece tener su primer puesto asegurado por un buen tiempo. Peñarol recuperó la fe (suma 5), pero está lejos todavía y no está claro si próximamente le alcanzará como para estar en la discusión. 

¿Y los 10 títulos de Gutiérrez? ¿Alguien podrá superarlos? Deberán cambiar mucho las condiciones generales, tanto de la economía del país como de la dinámica de la competencia, que por razones obvias expulsa hacia mejores destinos a los que se destacan, y cada vez más temprano. Es ley de vida. Argentina es una Liga exportadora de talento, que no es poco.