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Muchos cuando somos chicos vamos al club para hacer vida de club, sin importar qué deporte practiques, sino estar en el club, crecer allí, conocer gente, hacer nuevas amistades, tener una vida social distinta. Escuchábamos una pelota y nos metíamos a jugar sin importar si era básquet, fútbol, vóley o alguna otra disciplina. Había que hacer algo. Pero después, cuando había que empezar a competir, muchas veces nos decían que era imposible hacer más de un deporte, que había que elegir. Sin embargo, Katie Cox llegó para desmitificar esa situación y demostrar que ambas cosas pueden hacerse.

Katie Cox es una joven oriunda de Reino Unido, nació el 18 de abril de 2006. Es una de las grandes promesas del deporte de su país. Hay muchas expectativas alrededor de ella, pero no en un deporte, sino en dos. Es la portera del Chelsea Fútbol Club sub-21, a lo que hay que sumar su reciente convocatoria como tercera portera del primer equipo que entrena Emma Hayes. Un logro mayúsculo que concilia con su posición de pívot de los London Lions, uno de los equipos de mayor renombre de la British Basketball League. Recientemente se consagró campeona de la Eurocup de básquet. Si bien no sumó minutos en la final que su equipo le ganó a Besiktas, sí jugó durante el torneo.

A nivel internacional, Cox llevó el nombre de su país en ambas disciplinas: en fútbol fue la arquera titular de la selección sub-19 de Inglaterra e hizo lo propio en el básquet. Jugó tanto en 5x5 como en 3x3. Como si fuera poco, durante su última participación en el Europeo de categoría B de 2023, la joven promedió 7.7 puntos y 6.8 rebotes por partido.

Durante una entrevista reciente, la joven expresó: “Quiero ir con Inglaterra al Europeo Sub 18 de fútbol y representar a Gran Bretaña este verano en básquet”. Además, Cox rescató: “No sería la jugadora de básquet que soy hoy en día sin el fútbol y no sería la futbolista que soy sin el básquet”.