Especial

Extranjeros que hicieron historia: Wallace Bryant

10:18 30/04/2020 | El pivote de 2.13 revolucionó a la Liga cuando llegó a la Argentina para jugar en Atenas en 1991. Se quedó 6 años y nadie lo olvidó.

Foto Marcelo Figueras

En los 90, la decisión del gobierno argentino de implementar la convertibilidad, permitió que llegaran al país extranjeros de un nivel como nunca antes se habían visto. Quizá no haya sido Wallace Bryant un ejemplo de esto, porque cuando él arribo a Atenas de Córdoba, la medida llevaba pocos meses y el dólar seguía siendo una moneda cara. 

Esto ocurrió en 1991, cuando Atenas decidió rearmar un equipazo para destronar a GEPU de San Luis y reunió a toda su tropa de nuevo: Milanesio, Campana, Filloy, Osella, Villar y dos extranjeros de categoría, Wallace Bryant como pivote central y Robert Siler, un jugadorazo pero que en ese equipo salía de sexto hombre. 

Bryant, segunda ronda en el draft de 1982, no solo había jugado 3 temporadas en la NBA (104 partidos entre Chicago, Dallas, Clippers), sino que lo había hecho nada menos que en Cantú (campeón de Europa), y en el Barcelona (campeón de Liga, Copa y Korac), pero ya estaba en la etapa descendente de su carrera (32 años) y Argentina era un buen sitio para seguir jugando a un nivel alto y ganando buen dinero. 

Bryant, que había nacido en Torrejón de Ardoz, Madrid, por ser hijo de un militar que estaba destinado allí, tuvo un impacto inmediato en la Liga. Fue el pivote más determinante del año, clave para que Atenas se coronara campeón, profesional impecable, jugador de una gran calidad y, además, muy cálido para adaptarse al país. 

Tras salir campeón con Atenas en 1991/92 (16.5 puntos, 9.2 rebotes en 35.5 minutos de media) y no poder repetir en la 92/93 pese a sus 13.9 pts y 9.2 rebotes (perdió la final contra GEPU), lo fichó Peñarol para 1993/94 y allí otra vez tuvo una tarea decisiva para llevar a los marplatenses a su primer título (14.0 y 9.8). Su paso por Ferro en 1994/95 no pudo darle el salto en las posiciones a los porteños (17.1 y 8.4), y cerró su carrera en su primer amor, Atenas, en 1996/97, aunque solo participando de 6 partidos (6.5 y 7.8). 

Wallace Bryant dejó una marca en todos los clubes que participó, es uno de los grandes del básquet FIBA que pasó por la Liga Nacional y, por si fuera poco, se llevó dos anillos con dos clubes distintos. Hoy, con 61 años (foto de abajo), vive en Estados Unidos y maneja una academia de básquetbol que enseña a jóvenes.

 

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