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Tiago Splitter tuvo una gran carrera. Además de su paso importante por Europa, en el cual tuvo una destacada etapa en Baskonia. Allí ganó varios torneos: dos liga ACB, dos Copa del Rey, cuatro veces campeón de la Supercopa y varios reconocimientos individuales, como el MVP de la temporada regular y la final de la temporada 2009/10.

El brasileño luego llegó a la NBA de la mano de San Antonio Spurs y al igual que en España cuando fue compañero de Luis Scola y con Dusko Ivanovic como entrenador, en la mejor liga del planeta también formó parte de un proceso muy exitoso. En la franquicia texana también compartió plantel con otro argentino como Manu Ginóbili, además había otras estrellas como Tim Duncan y Tony Parker, quienes estaban bajo la dirección técnica de Gregg Popovich.

Splitter fue parte del campeonato obtenido en la temporada 2013/14 cuando superaron a Miami Heat en las finales por 4-1. Hace unos días, Tiago estuvo invitado en un programa de radio y habló sobre varios temas como su paso por la NBA, Baskonia, Wembanyama y más.

“Sí que ha habido muchos cambios, cuando yo llegué noté la diferencia de físico, de rapidez. Quizás el último equipo campeón con dos pívots fuimos nosotros con Duncan y yo; ahora se juega más con pequeños, se acaban los partidos sin pivote y eso hace que la liga sea más rápida con más espacios, contraataques, triples. Ya casi no hay defensa con el pívot bajo el aro, hay que saber adaptarse y buscar ventajas”, comentó Tiago cómo evolucionó la NBA.

Luego, habló sobre las diferencias entre la NBA y la competencia europea: “El baloncesto se ha globalizado, ya no hay trucos ni secretos y ahora los 3-4 mejores jugadores de la NBA son extranjeros. Es muy díficil ahora decir por qué los niveles se están acercando, pero aún EEUU tiene una fábrica de crear jugadores de baloncesto, además la cultura de deporte es muy fuerte. Al final los mejores jugadores quieren jugar en la NBA. Es muy fácil decir que en la NBA no se juega al baloncesto porque es mentira”.

Por último, habló sobre Wembanyama: “No se exagera con lo que se dice de él, es más largo que un día sin pan pero todavía tiene que aprender y saber cómo usar su cuerpo. Tiene calidad y está en un equipo donde lo van a trabajar, me dicen que tiene muy buena mentalidad, que es el primero en llegar y el último en marcharse y eso ya te da indicios de que este jugador va a ser una de las referencias de la Liga. Popovich le va a dar la mentalidad que necesita, tiene que pasar un proceso porque es muy raro llegar a la NBA y meter 30 por partido”.