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“¿Quién no quiere volver a casa?” dijo RJ Barrett en sus primeras palabras como jugador de los Raptors. Es que el joven perimetral canadiense nació en Toronto y ahora regresa a los 23 años luego de haberse ido en edad de escuela secundaria.

“¿Quién no quiere volver a casa y jugar frente a familiares y amigos y tratar de que un equipo que siempre amé tanto regrese a donde estaba en 2019?” agregó el ahora exjugador de los Knicks.

Y sin dudas llegar a la franquicia de la que es hincha es un sentimiento especial: “Crecí siendo fanático de los Raptors toda mi vida. Así que venir aquí y ponerme esta camiseta será genial”. En este sentido agregó: “He demostrado quién soy a lo largo de los años y sólo he tratado de mejorar y espero desbloquear algunas áreas nuevas de mi juego que no he podido mostrar tanto”.

Hijo del también jugador Rowan Barrett, se crió en Mississauga, en las afueras de Toronto. Fue fanático de unos Raptors donde pasaron grandes figuras como Vince Carter en esos años iniciales.

En su primer año de secundario, el joven decidió salir de allí y llegó a la Academia Montverde de Orlando, la misma donde jugó el argentino Pato Garino, donde comenzó a mostrar su potencial, para luego jugar en la Universidad de Duke y llegar a la NBA de la mano de los Knicks.

Ahora, después de cinco temporadas en la mejor liga del mundo, es tiempo para RJ de regresar a casa y tiene todo el potencial por explotar. Puede ser el líder de unos Raptors que están en plena reconstrucción y qué mejor que hacerlo con un hijo pródigo.