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Chris Paul comenzó el pasado juego ante Houston desde los suplentes, algo nada conocido para él. Es que el base vio cortada una racha de 1365 partidos en la NBA como titular, un récord histórico y que comprende a toda su carrera en la mejor liga del mundo.

Igualmente tuvo una gran influencia en el triunfo ante los Rockets, con 8 puntos, 5 rebotes y 7 asistencias en 27 minutos en cancha. Sin embargo, no es problema para Paul: “Es todo lo que tengo que hacer para ayudar a nuestro equipo a ganar. Si eso significa no terminar algunos juegos o esas cosas, sabes que, si tienes la oportunidad de jugar el tiempo suficiente en tu carrera, hay cosas que van a cambiar, hay cosas que van a ser diferentes, y yo 'estoy aquí’”.

A su vez, Steve Kerr elogió a Chris por su mentalidad para afrontar esta situación: “Él simplemente asintió con la cabeza y dijo: 'Vamos a buscarlos'. Ni siquiera es gran cosa. Cuando un veterano, un gran jugador, un All-Star muestra ese tipo de sacrificio, simplemente marca la pauta para todo el equipo”.

Increíblemente, su último juego como suplente fue en la NCAA en diciembre del 2004 y por un error. Es que llegó un poco tarde al micro del equipo y partió desde los suplentes en un juego ante Temple.