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Oveja Hernández actualmente no dirige ningún club y está lejos de sentirse retirado. Uno de los técnicos más ganadores del básquet nacional, actualmente prioriza el sentimiento para elegir su camino laboral. El último equipo que lo cazó en Argentina fue Peñarol en la temporada 2015-16, mientras que en el exterior tuvo su último cargo principal con Leones de Ponce en Puerto Rico. Tal como el Milrayitas hay otro club capaz de tentar con chispa el corazón de Sergio, su alma mater, Villa Mitre.

Los caminos de la libertad del entrenador y la vigencia en primera división del equipo tricolor casi coinciden. Los bahienses jugaron las Finales de la Conferencia Sur en la Liga Argentina la campaña pasada. Sin embargo, Racing terminó ganando la serie y accediendo a la final por el único ascenso de la categoria tras una serie 3-1.

Sobre la chance de volver con el equipo ascendido a primera, Oveja respondió: "Mi círculo ya empieza a cerrarse, si se cierra en Villa Mitre ya sería como un cuento de hadas lo mío". Pese a ser un escenario soñado y pensado por los fanáticos bahienses, el DT no lo había tenido en cuenta hasta ahora: "La verdad que nunca lo pensé, pero sí que sería una locura".

El sentimiento de Sergio hacía el club que fue su casa a cuadras de su casa es más que sincero e inmediatamente habló de sus recuerdos en la institución: "Tengo recuerdos de yo chiquito en el club, con los pelos así (como el oveja), en la tribuna y agarrado del para avalanchas, gritando cuando jugaban Raúl López, Zalguizuri, Marcelo Simons, Pichi Calderalli y toda esa gente con la que después conviví. De pronto terminar mi carrera en Villa Mitre, nunca lo pensé sinceramente, pero sería muy fuerte". Sentenció diciendo una frase que sintetiza para él, lo especial del club tricolor, "Sí visita Villa Mitre conozca Bahía Blanca".