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Después de un duelo entre Los Angeles Lakers y Minnesota Timberwolves en 2012, Kobe Bryant y Ricky Rubio, que entonces tenía 22 años, se cruzaron en una charla amistosa, donde Ricky aprovechó para provocarlo con los Juegos Olímpicos. Solo unas pocas personas han podido hacerle frente a Kobe cuando se trataba de esas clásicas charlas denominadas "trash talk" para sacar de lugar a un oponente. Bryant en eso era rey, pero el español le plantó cara.

"¿Están hablando de Londres?" preguntó Kobe a Rubio y Pau Gasol, que se habían encontrado en los pasillos del estadio tras el encuentro. "Sí. Te vas a llevar la de plata, ¿lo sabés, no?" replicó un joven Ricky, ante la sorprendida mirada de Gasol, quien conocía muy bien los riesgos de hablarle así a Bryant. 

La confianza de Ricky era admirable, porque también el comentario incluía que serían ellos los que destronaran a Estados Unidos, habiendo sido rivales en la final de los Juegos en 2008. 4 años más tarde, para Rubio era más que obvio que se encontrarían nuevamente en el escenario final, y no estuvo errado. El equipo español buscaba vengarze, y esto el #24 de los Lakers lo sabía muy bien.

Curiosamente, Rubio también estuvo en esa final de 2008, con solo 17 años era el base titular de España. No fue tratado como un chico más del roster que estaba al final del banco, como le pasó por ejemplo a LeBron James en Atenas 2004. Rubio jugó todo ese torneo siendo el líder organizador de un gren equipo español. 

Sin embargo, en 2012 la final también fue a manos estadounidenses, que hasta sufrieron menos que en Beijing durante ese juego con España. El Team USA apenas ganó por 7 puntos, en un torneo donde destrozaron a toda la competencia, a exceptuar Lituania.