TFB Sur: Ramos se llevó el duelo de punteros ante Lanús
15:23 24/11/2018 | Repasamos todo lo que dejó la jornada del viernes en el Torneo Federal, en este caso, en la Conferencia Sur.
DIVISIÓN BUENOS AIRES
El equipo de Comelli perdió el invicto de 11 partidos de local con la derrota 66-60.
El visitante logró dominar el juego, imponer su ritmo y contener cada intento de reacción de Zárate, que vivió su peor noche en ofensiva, con sólo un 33% en tiros de campo.
Zárate Basket empezó mejor y se puso rápidamente 4-0. Pero primero Barra con 4 puntos y después Del Bue con dos triples dieron vuelta la dinámica del encuentro que favoreció a Gimnasia 15-7. Desde entonces el trámite se tornó cuesta arriba para el local, que estaba confundido en ataque y superado en defensa (4/8 en triples para la visita). El primer cuarto terminó 22-11.
En el segundo cuarto, Zárate Basket no lograba adueñarse del ritmo del partido, abusaba de las individualidades en ataque y aunque ahora mostraban otra actitud seguían penando en defensa porque el equipo de Pergamino jugaba siempre al límite de los 24 segundos y encontraba la manera de anotar. Pasaban los minutos, la reacción de Zárate no llegaba (no hizo puntos de ataque rápido, una de sus fortalezas) y Gimnasia se las arreglaba para mantener la diferencia de más de 10 puntos. Así, el primer tiempo terminó 37-27.
Ya en el tercer segmento, tras cada intento de reacción de Zárate, Fumaneri se encargaba de poner paños fríos (11 de sus 19 puntos los hizo en el tercer período). A falta de 3 minutos, Gimnasia sacó la máxima de 17 puntos (56-39). Gimnasia no se salía de su libreto y seguía poniendo incómodo al local. El cuarto terminó 59-46.
Al comienzo del último cuarto, Zárate Basket presionó en toda la cancha, logró imponer su ritmo y tuvo se rédito: metió un parcial de 14-4 para ponerse abajo 63-60 cuando faltaban 5 minutos. Sin embargo, cuando parecía que atropellaba a Gimnasia, el local otra vez cayó en un pozo, se obsesionó con el tiro exterior (7 triples tirados y errados) y no convirtió más puntos en el partido. La diferencia no se amplió porque el visitante también se mostró errático y sólo a falta 1:10 minutos Marelli puso 65-60 casi definitivo.
Para Zárate Basket, Gimnasia de Pergamino demostró ser un rival incómodo que no sólo lo derrotó en los dos juegos en los que se enfrentaron, sino que también se quedó con el invicto de 11 partidos que tenía en el gimnasio “Carlos Vasino”.
El Rancho venció 92-78 al Rojinegro en un juego de alto voltaje, muy friccionado y que fue parejo a lo largo del desarrollo.
La experiencia y el mayor recambio fueron vitales en el local para sobrellevar a un rival que corrió de atrás, pero que tuvo pasajes de buen juego. Alejandro Fidalgo con 21, fue el máximo goleador del partido.
En el marco de la octava fecha de la División Bonaerense del Torneo Federal, Atlético Pilar pudo recomponerse de las dos derrotas consecutivas en el clásico contra Presidente Derqui. Fue 92-78 para los dirigidos por Andrés García, que tuvieron en Alejandro Fidalgo a su máximo anotador con 21 puntos, seguido de cerca por Leandro Portillo que sumó 20. En un cotejo repleto de paridad y con alta temperatura, el local tuvo el temple necesario para defender la ventaja ante un adversario entusiasta y que hilvanó muchos buenos momentos, sobre todo en los primeros cuartos.
En el inicio se lo vio mejor al Rojinegro, buscando imponer su estilo y, por tramos, lo consiguió. Sin embargo, la eficacia en los ataques que tuvo Atlético lo adelantaron. Francisco Dinova, con nueve, mantuvo en juego a su equipo; mientras que la presencia de Fernando Calvi para capturar los rebotes fue vital. Finalmente, cerraron un exiguo 23-18 favorable.
El segundo segmento lo tuvo mejor a Derqui en los primeros minutos. La sapiencia de Sebastián Acosta comandó a los de Esteban Sánchez a un prometedor parcial de 6-2 en los movimientos iniciales, pero no pudieron sostenerlo. Las respuestas del Rancho llegaron desde el banco: un encendido ingreso de Joaquín Thorp en la zona pintada y de Guillermo López, sumado al panorama de Fidalgo, le dieron aire al local para irse al descanso 48-36 arriba.
El descanso le sentó mejor a los derquinos que salieron con intensidad y con Camilo Cáceres letal desde la línea de tres, así pudieron acercarse luego de redondear un gran parcial de 15-5. Luego del vendaval, Atlético pudo recomponerse cuando Fidalgo y Portillo salieron al rescate, sumado a buenos niveles individuales de Calvi y Pelorosso, aún con imprecisiones, y a la quinta falta personal de Cáceres. El anfitrión pudo irse arriba en el marcador, pero con un ajustado 66-64.
En último cuarto fue electrizante y le pasó factura a ambos por el desarrollo friccionado que habían disputado: Darío Mansilla también llegó a la quinta falta en Derqui antes de la mitad del segmento y, más cerca del final, le sucedió a Calvi en Atlético. La precisión de Portillo en los libres y un triple de Pelorosso en el principio sirvieron para destrabar al Rancho, darle tranquilidad para meter un 12-4. A partir de allí, aprovechó su buen momento y manejó los minutos de cierre.
Un triple de Fidalgo sobre la chicharra sentenció el 92-78 final para Atlético Pilar, que pudo volver a sonreír tras un fin de semana negro, se reacomodó en la zona frenando el impulso de Presidente Derqui y su racha de victorias consecutivas.
El equipo de Mar del Plata derrotó 96-87 a Argentino de Pergamino y festejó por primera vez como local.
El arranque del juego fue para la visita, que con un parcial de 8-4 en 4 minutossacó la primera ventaja a su favor de la mano de Eterovich y Levato. Unión intentaba, pero la efectividad no estaba de su lado y todo se hacia cuesta arriba. Argentino de Pergamino supo ajustarse en defensa y con un par de contraataques apagó cada intento de arremetida de Unión y se quedó con los 10 primeros minutos con un 25-16.
El segundo cuarto arrancó con un local más enchufado y lentamente fue acortando la ventaja. Un parcial de 16-9 en 5 minutos lo puso a 4 y todo empezó a andar mejor para el celeste. Julían Roumec comenzó a lastimar y Fernando Salazar seguía siendo clave en la pintura y cada tanto con su tiro externo. Sumado a ellos dos, Martín Ramat aportó desde el banco, para así terminar el segmento 44-44
A la vuelta del descanso largo, Unión empezó enchufado en defensa y pasó por primera vez arriba en el marcador. Un parcial de 12-4 en 4 minutos a favor del Celeste obligó a Eduardo Tersoli a pedir minuto e intentar reacomodar a su equipo. Con un doble de Lucas Cassettai, Unión llego a sacar 8 (56-48). Martín Ramat tiró del carro de Unión y con 7 puntos consecutivos llevó a Unión a una ventaja de dos dígitos.
Unión intentó aumentar la ventaja pero Bordoy y Fontana no dejaron que la ventaja fuera mayor de 10 puntos y permitieron que llegaran a los 10 minutos finales 8 abajo (76-68).
Con la tranquilidad de estar arriba en el marcador, Unión se hizo fuerte en defensa y cada vez que pudo aprovechó sus ofensivas para volver a ponerse arriba por 10 (83-73). Argentino no se dio por vencido y siguió intentando, pero Unión siempre estuvo en control del juego. Un parcial de 7-0 a favor de Argentino achicó la ventaja pero el reloj jugaba a favor de Unión, que festejó la primera victoria en casa 96-87.
Ahora, Unión y Argentino se volverán a ver las caras el domingo en El Quincho.
DIVISIÓN CUYO
En un partido muy parejo y con un final dramático, GEPU le ganó 66-64 a Junín.
El encuentro se caracterizó por la paridad durante todo el encuentro, ambos equipos demostraron una férrea defensa. No lograron sacarse ventaja durante toda la noche.
En los primeros diez tuvo un mejor comienzo la visita. De los 16 puntos, 12 fueron convertidos desde la línea de tres. Torres inquietó y se movía por todo el perímetro y la dupla Cabello - Sola fuertes debajo del cesto hicieron que el primero se lo lleve la visita 16-12. Junín llegó pero estuvo errático en los tiros.
En el segundo parcial el trámite cambió. Junín en el comienzo metió un 8-0 que pareció que iba a sacar diferencias. Castellani clavó dos bombas en el momento justo. En Gepu apareció Busso (5), que metió la mitad de los puntos que convirtieron en el cuarto, para dejar empatado 26-26 el primer tiempo.
El tercer episodio correspondió a la visita por la mínima (42-41), gracias a un goleo repartido de Busso, Mas Delfino y el experimentado Cabello. En el local, aparecieron 3 triples de Pinto que acortaron diferencias.
Los últimos diez tuvieron mucho dramatismo. El partido se volvió emocionante con un final incierto. A falta de 9 segundo, se generó una pelota abierta para Pinto que convirtió un triple para igualar 52-52 y activó el suplementario.
La definición pudo haber sido similar en el tiempo extra. Una bomba de Busso puso el partido 66-64 a favor de GEPU, cuando restaban 4 segundos. La bola decisiva fue a las manos de Rodrigo Lavezzari que tiró, pegó en el aro y salió. Triunfo de GEPU 64 -66 en un partido que pudo haber sido para cualquiera de los dos.
El equipo cordobés derrotó 79-72 a All Boys de Santa Rosa y alcanzó la cima de la División Cuyo.
El Albinegro logró inclinar a su favor un partido durísimo ante un rival que lo complicó, y mucho, durante gran parte del juego. Una ráfaga de triples en el comienzo del cuarto final le dieron tranquilidad al local para quedarse con una nueva victoria y subirse a la cima de la tabla de posiciones.
El local regresaba a casa después de la exitosa gira por La Pampa donde sumó dos victorias en dos presentaciones. Por su parte All Boys venia de dividir victorias, el pasado fin de semana ante Municipalidad de Junín.
Desde el inicio, la visita le mostró a Bell que no le haría fácil las cosas. Un interesante trabajo en la conducción, alternada en la primera mitad entre Manera y Zarate, más una solidaria convicción de pasar la pelota y encontrar, fundamentalmente en la pintura, opciones para lastimarlo. En defensa una zona atentó a las numerosas variantes que suele mostrar Bell en ataque, aunque con algunos desajustes.
Por su parte, el dueño de casa buscó en sus recursos conocidos los caminos para encaminar el partido. Mucho pase para encontrar el mejor tiro en la línea de 6.75, y una defensa alta para tratar de recuperar la bola y correr dañando a su rival. Bell tuvo en ese esquema muchas opciones para lastimar, provocó muchas pérdidas en el rival y tomó tiros desde posiciones realmente ventajosas, sin embargo una sorprendente falta de eficacia lo complicó y le impidió tomar ventaja.
En ese contexto el desarrollo del partido fue de una paridad extrema. El primer cuarto lo ganó por uno la visita, 20-19, y en el segundo devolvió gentilezas Bell con un 16-15 que llevó el juego al descanso con igualdad en 35-35.
En la tercera manga, All Boys mostró su mejor repertorio, con Lara (de gran partido) Manera, Fazzini y Zalabardo como abanderados. Bell solo pudo sostenerse cerca en el marcador, con mucho esfuerzo y claramente incómodo, con una ofensiva “deprimida” por un altísimo porcentaje de errores. El descanso llegó con la visita arriba en el marcador por 5 puntos, 61-56.
Pero Bell sabe de estas luchas y de ráfagas que sentencian un juego. En solo 2minutos, en el cuarto final, metió 4 triples y un doble, arrebatándole el control del partido a los de Santa Rosa. El estadio se convirtió en una caldera y All Boys cayó preso en una confusión generalizada, groggy por el duro golpe aplicado por el local. Cuando llegó el pedido de minuto de Juan cruz Gavasa, habían corrido poco más de 3 minutos de reloj y Bell había pasado de perder por 5 a ganar por 7 (70-63). El visitante intentó encaminar la historia, pero ya Bell gobernaba el partido, con tranquilidad y con la experiencia de algunos hombres fundamentales en el esquema de Fernando Aguilar (Martina otra vez cumplió una actuación de excepción).
Fue triunfo para Bell 79-72 , celebrado con un gran abrazo en el centro del campo de juego. De esta manera, uma 6 victorias en 7 presentaciones Bell, en una campaña notable que le permite subirse a la cima de la zona Cuyo.
DIVISIÓN METROPOLITANA
Pedro Echagüe se llevó un ajustado triunfo por 73-71 de San Justo. Prego 21 y Messa 28 fueron los máximos anotadores.
El Globo de San Justo luchó ante Pedro Echagüe, pero no le alcanzó. La conducción de Cisterna con 16 puntos y 7 asistencias, más la experiencia de Prego (21) para anotar en los momentos claves, lo dejaron con las manos vacías al equipo de Germán Tamagusuku. El peso de la ofensiva local corrió por cuenta de Messa y Aboud que se combinaron para sumar 50 de los 71 de Huracán.
En los primeros diez de acción, el Globo fue más, de la mano de sus perimetrales Messa (6) y Aboud (5), con muchos rompimientos hacia el canasto. Por el lado de Echagüe la polenta de Acosta (6) lo mantuvo en partido. Un triple de Fernández (5) selló el primer parcial en favor del local 21-18.
En el segundo segmento apareció toda la categoría de Prego (11) para poner al conjunto de Flores arriba en el marcador, bien acompañado por Cisterna (6) y tres asistencias y sacar la máxima del primer tiempo (33-25). Dos libres de Fernández sentenciaron la chapa de la primera mitad 33-27.
Huracán inauguró el tercer cuarto con un lujo, alley oop de Aboud para que la enterrara Messa y encender al Juan Carlos Mancuso. Pero la conducción de Cisterna y las bombas que trajo desde el banco Echeverría, pusieron paños fríos a la arremetida local. Un doble de Acosta marcó la máxima para el conjunto de Flores (41-32), pero las penetraciones picantes de Aboud (12) y Messa (7) dejaron la diferencia en la mínima en la clausura del tercero 47-46.
En los diez finales, Prego volvería a tomar protagonismo, para llevar la ofensiva del conjunto de Boadaz, con 10 puntos en el parcial, triple incluido cuando lo ahorcaba el reloj de posesión, para poner 72-65 en el último minuto de juego. La polenta de Messa (13), más un doble y falta de Aboud, dejó al conjunto de La Matanza abajo por la mínima, tuvo en la línea de libres con Fernández la posibilidad de pasar al frente, pero el nacido en Burzaco falló ambos. Echeverría estiró a dos la diferencia con un libre y con 4 segundos el tiro desesperado de Fernández que no llegó a destino y le dejó la victoria a Echagüe.
Gracias a una gran segunda mitad, el Tiburón venció 83-79 a Estudiantes de La Plata.
La figura fue Emiliano Bolgeri con 18 puntos y 7 rebotes, mientras que en el visitante se destacó Michelle Castro con 19 unidades y 7 tableros.
Si hay que buscarle un porque a la victoria de Caza y Pesca sobre Estudiantes de La Plata, sin duda que el principal motivo está en la segunda mitad. Quizás, el local no mejoró mucho en el juego, sino que cambió la actitud, hizo dos o tres ajustes defensivos y demostró que, cuando se lo propone, es un equipo que defiende muy bien. Estudiantes estuvo gran parte del segundo tiempo con dificultades para anotar, la mayoría de sus aciertos eran muy forzados y después de jugadas desprolijas.
En cuanto a la ofensiva del conjunto local estuvo muy bien repartida, cuatro jugadores del quinteto inicial anotaron más de 10 puntos. Si bien Bolgeri fue la figura del encuentro, estuvo muy bien acompañado por los 20 puntos de Alan Koleff, los doble – doble de Enzo Avalos y Juan Martin Reggi; 14 tantos y 11 rebotes hizo el ex Lanús, mientras que el capitán del tiburón logró 14 unidades y 10 tableros. El conjunto dirigido por Daniel Bello se llevó un triunfazo de Don Torcuato, dos puntos que le vienen muy bien a la cabeza del conjunto torcuatense, ya que vencieron a un rival directo en la lucha por el descenso.
El comienzo del encuentro fue favorable a Estudiantes, gracias a dos dobles y falta de Castro y Facundo Vallejos. En cuanto al local, se encontraba dormido en defensa y casi todo su juego se basaba en el ataque estacionado. Sin embargo, cuando Caza y Pesca pudo correr la cancha, lastimó, para achicar 16-12 para el Pincha. Pasaban los minutos y Lautaro Noguera se convertía en el eje de la ofensiva del conjunto de La Plata, el escolta y sumaba 7 puntos. Un doble de Alan Steck, tras un muy buen alto bajo con Avalos, daba por finalizado el primer cuarto, 21-18 para el visitante.
Un doble de Bolgeri, tras un gran movimiento de pelota, inauguró el segundo cuarto. Caza y Pesca salió con otra actitud a jugar este periodo, tras un triple de Bello, y una bandeja sobre la chicharra de Bolgeri lograba un parcial de 5-0 y pasaba al frente, 35-30 a falta de 5 minutos. Sin embargo, Estudiantes respondía con una muy buena conversión de Mazza. Con el ingreso de Bello, el local tenía un ritmo de juego mucho más alto y estaba decidido a correr la cancha. Una bomba de Boccatonda igualaba 35-35. Reggi anotaba una linda bandeja, pero respondía Ignacio Colsani con 4 al hilo. El primer tiempo finalizó 41-39 a favor del Tiburón.
El tercer cuarto fue el momento de quiebre del partido. Caza y Pesca salió concentrado desde el primer minuto, dado que concretó un pasaje 9-2 (50-41). El dueño de casa estaba siendo muy agresivo en defensa, hacía atrapes en el poste bajo y rotaba muy bien; esto a Estudiantes lo perjudicaba muchísimo, ya que estaba muy incómodo y le costaba convertir. Una bomba de Federico Barraza, tras una muy buena circulación de pelota, ponía a los suyos a 6, 60-54. Bolgeri anotaba una conversión desde 6,75 y le daba un poco de aire a los dirigidos por Daniel Bello; pero Vallejos respondía de la misma forma, el parcial del Pincha era 12-4. Un doble de Reggi finalizó el periodo en el que el conjunto torcuatense ganaba 65-59.
Dobles de Vallejos y Avalos inauguraron el último episodio. Triples de Bello y Bolgeri le daban ventaja de 9 al local, pero Estudiantes no se rendía y, desde 6,75, contestaba con Facundo Attademo, 72-66 a falta de 6 minutos. 4 puntos al hilo de Reggi hacían que la diferencia toque su techo, 78-66. A medida que iban pasando los segundos, Caza y Pesca era más dominador del ritmo del partido, sin embargo el visitante, después de un tiempo muerto, puso toda la carne al asador. Comenzó a presionar toda la cancha y defender cuadrado y uno, personal de Attademo a Bolgeri. Esta estrategia utilizada por el Pincha hacía que el cotejo se vuelva un poco más físico, por eso Mateo Boccatonda y Reggi intercambiaron algunas palabras. Libres de Mazza acercaban a los suyos a 5, a falta de 60 segundos, pero Avalos y Koleff, desde la línea, liquidaron el partido. Fue victoria por 83-79 para los de Don Torcuato.
La próxima fecha, que se jugará el domingo, Caza y Pesca visitará a Los Indios de Moreno. Mientras que Estudiantes recibirá a Racing Club de Avellaneda.
En la previa de este encuentro, se jugó el 3X3. Fue victoria de Caza y Pesca por 22-20 y suma 6 triunfos, en 7 partidos.
El espectáculo de medio tiempo estuvo a cargo del Instituto Artístico D’Antino.
El Amarillo mostró una mejoría en su juego pero no le alcanzó y cayó por 83-79, como local.
Luego de una primera mitad pareja, River sacó una ventaja clave en el tercer capítulo y supo aguantarlo sobre el cierre a pesar de la reacción del local. Maximiliano Pellegrino se destacó en el ganador con 16 puntos, mientras que no alcanzaron las 18 unidades de Mariano García en los de Navazo.
El Amarillo comenzó el encuentro bien intenso en ambos costados de la cancha, para dominar el juego y sacar una ventaja inicial de 14-6. A partir de un tiempo muerto, River se acomodó con el ingreso de Rodríguez y logró emparejar poco a poco, aunque Unión se mantuvo en su libreto y cerró el primer cuarto al frente por 23 a 17.
En los primeros momentos del segundo parcial, el Millonario aprovechó la presencia de Rodríguez en la pintura y pasó al frente por primera vez. Pero, a partir de allí, el duelo se transformó en un ida y vuelta constante que hizo alternar el tanteador de liderazgo. Así, el partido llegó al entretiempo con empate en 38 en el tanteador.
Al regreso de los vestuarios, River entró más despierto y con un Gavotti encendido tanto para anotar como para repartir juego. Del otro lado, Unión perdió fluidez en ofensiva y empezó a depender de acciones individuales, por lo que la visita sacó ventaja máxima de 17 puntos (59-42). Desde ese momento, el conjunto de Navazo apostó a una defensa zonal en todo el campo que le permitió frenar a su rival pero que no le permitió acercarse, por lo que llegaron a los diez finales abajo por 64 a 49.
En el cierre del partido, el Amarillo buscó por todos los medios la remontada y empezó a limar poco a poco la diferencia, siempre ante un conjunto de Santín que se mantuvo intenso y tuvo en Bruno al dueño de la pintura. A pesar de esto, Unión tuvo un gran ingreso de Griszka y García sobre el final, estampó un parcial de 15 a 5 y llegó a ponerse en juego a falta de 40 segundos.
Tras tres derrotas seguidas, el elenco de Mataderos volvió a triunfar por 82-74 frente a Los Indios de Moreno.
Marcelo Piuma (con 23 tantos y 5 rebotes) y Federico Rellihan (18 puntos) se destacaron en el equipo que dirige Flavio Fernández.
Fue un partido no apto para cardíacos. José Hernández y Los Indios de Moreno brindaron un gran espectáculo. El 82-74 final no desentonó en cuanto a la paridad que reinó en el partido. Hubo momentos para ambos equipos en el cual, a excepción de los últimos segundos, la diferencia entre ambos no superó los seis puntos.
El ganador consolidó la ventaja dentro de los 24 segundos finales del partido, que se dio con cuatro puntos de Matías Diorio (un doble y dos libres), siendo el jugador clave para el cierre. Previamente se repartieron el dominio del encuentro.
La premisa en el trámite de ambos fue apostar al ataque rápido. La visita inició mejor el encuentro, con buenas contras bien encabezadas por el experimentado Alejandro Eiguren y bien terminadas por Agustín Agüero. También tuvo sus momentos Matías Fioretti, tanto en el poste bajo como también en el tiro externo (totalizó 2/3 en tiros de tres puntos). Hernández no fue menos, anotando a través de buenas penetraciones de Mateo Marziali (6 tantos en el primer segmento). Otro jugador que incidió en el dueño de casa fue Marcelo Piuma, quien al igual que Fioretti en Los Indios, se lució en el poste bajo como también en tiros de tres puntos (2/3).
Entre el cierre del primer cuarto y el resto del partido, ambos equipos alternaron entre ataques rápidos y un juego más estacionado. Los dirigidos por Juan Ignacio González apostaron a la defensa zonal 3-2, con la idea de neutralizar el juego interno del dueño de casa.
En el tercer capítulo, con Los Indios estuvo fortalecido en tiros externos, teniendo como protagonistas a Ezequiel Manzanares, Agustín Prandi, Agüero y Eiguren, quienes se repartieron el goleo. En cambio, Hernández sumó un plus con el ingreso de Facundo Varela, clave en la pintura. El necochense fue eficaz en tiros libres (8/10) y además aportó en defensa (totalizó 4 rebotes), logrando disimular la ausencia de Piuma, quien fue sustituido por acumulación de faltas y guardarlo para los últimos 10 minutos. También incidió Federico Rellihan (18 tantos, incluyendo 3/6 en triples, 3 de cuatro en dobles) quien a 3:26 minutos del final del parcial puso al frente a su equipo con tres libres (53-52), lo cual fue un punto de inflexión y de confianza para el equipo local, que se llevó el cuarto 57-56 en favor de la visita.
Los diez minutos finales continuaron siendo parejos e intensos, pero se dio un momento clave que golpeó a Los Indios: la salida por límite de faltas de Fioretti a 4:30 minutos del final. Desde ese entonces, José Hernández tuvo más facilidades en el juego interior, teniendo segundos tiros en ataque.
También la visita, si bien se mantuvo en pie por aportes de Manzanares y Eiguren, empezó a tener algunos yerros en ataque, lo cual le dio trabajo a Juan Talpone, quien se destacó en defensa (tomó 7 rebotes) y disimuló la salida de Piuma, quien llegó a las cinco faltas. Rellihan tuvo un rol clave al acertar dos triples consecutivos, dejando inútil la defensa zonal rival.
En el minuto final estaba claro que el que se equivocaba, perdía; y fue el elenco que conduce González, que sintió la ausencia de Fioretti, y también dejó atrás la zona para defender hombre a hombre, lo cual facilitó el trabajo a los de Mataderos, que a través de los cuatro puntos determinantes de Diorio (incluyendo una flotadora cerca del canasto) y luego una bandeja de Marziali terminen sellando el 82-74, con el cual los dirigidos por Flavio Fernández volvieron a la victoria después de tres derrotas consecutivas.
Ramos hizo un partido completo en todos los rubros y respaldó su buen andar en el Torneo Federal con un contundente 93-69 sobre Lanús.
Este resultado sostiene además la condición de imbatible para el equipo de Marcelo Travnik al cabo de siete fechas.
Si bien es muy difícil destacar una sola figura en la perfecta noche que tuvo Ramos, Exequiel Cassinelli fue descollante en ataque e indetenible para la defensa de Lanús. El santafesino se alzó con 26 puntos y fue escoltado por Federico Glinberg, con otros 15 tantos. La estadística respalda además el rendimiento del local con un 64% en dobles y un 53% en tiros de campo.
Antes del comienzo del partido, el base y capitán granate, Kevin Jerez Pilotti, fue homenajeado por la institución local y recibió en manos del presidente de Ramos, Nicolás Martani, un cuadro gigante con la camiseta que vistió en la temporada 2016/17 del Torneo Federal. Jerez fue el jugador más determinante de Lanús y sus 20 puntos no alcanzaron para una remontada. Además, tuvo que dejar la cancha por cinco faltas personales, lo que debilitó a su equipo en el tramo final.
Tras un primer cuarto intenso y parejo en el cual ambos equipos se intercambiaban puntos, Ramos se fue adelante por la mínima ventaja (25-24). Glinberg y Cassinelli, cómplices de varias acciones ofensivas que arrancaron aplausos en las tribunas, adelantaban al Rancho, mientras que las punzantes penetraciones Jerez Pilotti y algunos triples de Fernando Funes y Martín Trímboli acercaban a Lanús. Todo estaba dado para un partidazo.
Un doble de Martín Franchino puso adelante a Lanús (34-33), pero Ramos aumentó su agresividad y metió una corrida de 8-0 (41-34) con una bomba de Sebastián Sevegnani (gran partido con 14 puntos) y otra de Cassinelli. El Rancho aceleró en el tramo final del segundo cuarto y se fue al descanso largo con un crédito de diez (51-41).
El momento Sevegnani se extendió en el inicio del tercer cuarto con cinco puntos seguidos del ala pivote, pero Lanús empezó a encontrar el tiro de tres puntos de Jerez Pilotti (8 tantos de corrido) y de Leopoldo Ibáñez Paz (terminó con 14 unidades). Un triple de Glinberg mantuvo la distancia de doble dígito (59-49) y Ramos entró con una mejor imagen al último segmento.
Allí se terminó de cocinar el triunfo local con diez minutos sublimes. Un parcial de 16-3 que encabezó el Coco Piñero con dos triples, más el sostenido trabajo defensivo de Juani Catalano (sobre Funes) y Galo Terrera (sobre Jerez Pilotti) fueron las claves de un merecido triunfo. El gigante Sebastián Chaine también fue custodiado por las dos torres: Glinberg y Raúl Salvatierra, quien siempre cumple su labor.
Ramos dejó su sello ante su público y ante un rival que por peso propio y calidad será protagonista en el Torneo Federal. La historia continuará el domingo para el Rancho, cuando visite a otro candidato como River, en Núñez.
La estadía en la senda de la victoria se le terminó abruptamente al equipo que dirige Germán Intonio. El viernes por la noche, en el Centro Deportivo y por la séptima fecha del Torneo Federal, la Academia tropezó con Estudiantil Porteño y perdió por 76-71 en un partido sin mucho vuelo. De esta forma, Racing se mantiene con un récord de cuatro triunfos y tres caídas.
Le fue complicado al dueño de casa encestar desde el comienzo. Sin la precisión de otras jornadas, las malas decisiones se acumularon y los de Ramos Mejía terminaron el primer cuarto con una ventaja de 17 a 10. Si el parcial inicial había sido difícil, el segundo fue todavía más complicado porque, sin desequilibrio en el ataque, Racing padeció la acumulación de errores y se fue al descanso 32-20 abajo.
La Academia buscó revertir la tendencia a lo largo de todo el segundo tiempo pero no encontró soluciones a través de sus principales piezas y terminó hundiéndose en el malestar lógico de quien sabe que podría haber dado mucho más. Habrá chance de revancha pronto porque el domingo, a partir de las 20, será el turno de visitar a Estudiantes de La Plata en City Bell por una nueva fecha de la División Metropolitana del Torneo Federal.
DIVISIÓN PATAGONIA
El conjunto de Allen perdió 87-63 ante Pérfora de Plaza Huincul.
Los primeros minutos de juego fueron parejos con trabajo en equipo de ambos planteles. Los Magos cerraron bien su defensa y la visita sumó con los intentos desde fuera del perímetro. La puntería le valió la supremacía en el marcador al agotarse el primer cuarto.
En el segundo segmento el cuerpo técnico local decidió confiar en Bornic y Jaimes de entrada. Pérfora apeló a la habilidad de González para romper la aguerrida defensa local. El partido se puso interesante con el esfuerzo de Unión y la ofensiva permanente de los verdes. El dueño de casa repuntó sobre el cierre del cuarto y calentó el ambiente. La tribuna se animó a levantar la voz y le dio confianza a los locales. El espíritu de Unión no disminuyó a pesar de que marró varios tiros, dado que lograron controlar a Pérfora, que estiró su liderazgo pero no de manera irreversible.
Dentro de los allenses el de mejor desempeño era Sanz, responsable de más de la mitad de los tantos del Mago. En Pérfora el juego colectivo fue la fortaleza. El desafío para Unión era sostener su defensa y abrir el aro para crecer en el marcador. Sin embargo, al volver de los vestuarios el anfitrión se mostró impaciente y errático. Los intentos fallidos pusieron nervioso al plantel y favorecieron el juego de la visita.
Pérfora tuvo buena fortuna y convirtió con facilidad, mientras que Unión se estancó en el tablero. El minuto pedido por Paglialunga expuso la desesperación de los allenses. Escalante respondió con un triple que llenó de esperanzas a los hinchas. El equipo y la tribuna se activaron para hacerse sentir.
En la última fracción del partido Bornic y Barría colaboraron forzando la falta y siendo efectivos en los tiros simples. A pesar de los esfuerzos, Pérfora sacó 2 decenas de distancia. La tranquilidad no reinó en el banco de Unión. Sanz y Jaimes tuvieron que sentarse por acumulación de faltas. La visita se volvió escurridiza y anotó cada vez que buscó el aro. Los verdes supieron frenar a los Magos para mantenerlos nerviosos. Unión probó con triples, pero la necesidad no se trasladó en puntería. Con resignación, los fanáticos miraron cómo se agotaba el tiempo en el reloj, que terminó con el triunfo de Pérfora.
El Tricolor perdió 65-62, como local, en el marco de la División Patagonia.
El dueño de casa parecía tener el juego controlado pero no pudo cerrarlo y la visita se quedó con el triunfo en el último tramo del partido.
Todo el primer cuarto fue dominado por el local, que impuso su juego desde el inicio del encuentro. Una gran fluidez ofensiva para generar buenos espacios en los lanzamientos y rápidas rotaciones defensivas, le dieron una amplia ventaja al anfitrión. La eficacia desde la línea de tres puntos era casi perfecta para los de Cinco Saltos, mientras que los de Viedma cometían errores y no eran precisos en sus tiros. Tal es así, que esa primera etapa acabó 26-6 favorable al dueño de casa.
En el inicio del segundo período, Sol de Mayo se mostró más activo para anticipar los ataques de su rival y achicó la distancia en el marcador a través de buenos contragolpes. Al CACS le costaba encestar pero era sólido defensivamente y mantenía una diferencia de 16 tantos a favor (34-18) cuando promediaba el cuarto. En el cierre del mismo, intercambiaron aciertos desde fuera del perímetro, y los locales se fueron al descanso liderando el partido 38-25.
Tras el retorno de los jugadores del vestuario, los de Sergio Bellandi recuperaron intensidad y retomaron el control del encuentro. Buenas penetraciones y, nuevamente, los triples eran fundamentales para el Tricolor que ganaba 46-27. La reacción de los de la capital rionegrina no se hizo esperar, y fueron superiores desde la mitad hasta el cierre de aquella etapa. El mismo terminó con el marcador 51-38, a favor del local.
Finalmente, el último período tuvo a un CACS muy impreciso, tanto en sus lanzamientos, como en sus pases y Sol de Mayo no dejaría pasar la oportunidad. Los visitantes capitalizaban los robos con buenos contraataques e imponían su ritmo en el partido y así redujeron la distancia en el resultado a 10 unidades (56-46) cuando promediaba aquel cuarto. El Club Atlético Cinco Saltos no conseguía anotar y los de Viedma empataron el encuentro (59-59) tras una bandeja con 1 minuto por disputarse. La diferencia en el final fue la efectividad desde la línea de los tiros libres, favorable al elenco de Viedma, que acabó imponiéndose 65-62.
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