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A pesar de las preocupaciones sobre la caída en los índices de audiencia y las críticas en las diferentes redes sociales, la NBA sigue siendo financieramente sólida. La última prueba de ello es la venta récord de los Boston Celtics por 6.100 millones de dólares, superando a los Washington Commanders como el equipo deportivo más caro jamás vendido en Estados Unidos. Esto demuestra el crecimiento constante del valor de las franquicias en la liga.

Entre las ventas más altas en la historia de la NBA, los Suns fueron adquiridos por 4.000 millones de dólares en 2022, seguidos por Brooklyn Nets, vendido por 3.300 millones en 2019. Otras transacciones destacadas incluyen la compra de Houston Rockets por 2.200 millones en 2017 y la de Los Angeles Clippers por 2.000 millones en 2014. Incluso equipos de mercados más pequeños, como Utah Jazz y Minnesota Timberwolves, alcanzaron valoraciones de 1.600 y 1.500 millones de dólares, respectivamente.

Completando el top 10, los Raptors fueron vendidos dentro de un acuerdo mayor por 1.300 millones de dólares, mientras que New York Knicks cambió de dueño por 1.100 millones en 1994. Atlanta Hawks, a pesar de su menor impacto mediático, fue comprado por 850 millones en 2015. Estas cifras reflejan el crecimiento financiero de la NBA y confirman que, a pesar de los cambios en el consumo de medios, el valor de sus franquicias sigue en aumento.