Desde que firmó su regreso a su querida franquicia, Magic Johnson ha empezado a trabajar en lo que será la renovación y reconstrución de Los Angeles Lakers. Preocupado, dispuesto a emplearse a fondo y con la idea de que el equipo vuelva a sus mejores épocas, la leyenda será asistente de Jeanie Buss en operaciones de básquet y negocios para tratar de mejorar el panorama de los californianos.
Días después de tomar este cargo en los Lakers, Johnson se presentó al programa CBS This Morning de este lunes para hablar de sus nuevas responsabilidades y tareas, siendo realista en admitir que el proceso para levantar al equipo llevará un par de temporadas.
"Tomará de 3 a 5 volver a rodar de nuevo, si somos pacientes y desarrollamos a nuestros propios jugadores. La NBA de hoy es diferente a cuando yo jugaba. Tu tienes que desarrollar a tus propios jugadores porque el movimiento de la agencia libre no es como solía ser. Tienes que asegurarte hace un home run con los jugadores que seleccionas y mantener a los que tienes en tu roster", explicó Magic.
Johnson ya ha sido bastante crítico con el vicepresidente Jim Buss, pero esa parece ser otra historia porque la intención de la leyenda es colaborar con Jeanie en esta levantada del equipo. "En este momento de mi vida puedo hacerlo. Mis negocios están funcionando bien y puedo entregarlos al gran equipo ejecutivo que tengo" explicó Magic, que entre sus varios negocios también es parte del grupo propietario de los Dodgers de béisbol.
Magic también admitió que al aceptar su regreso a los Lakers rechazó cuatro ofertas para pertenecer a otras franquicias NBA. Entre aquellos interesados por sumar a la leyenda confesó que tanto los New York Knicks como los Detroit Pistons lo buscaron.