Brooklyn no pudo cortar su racha negativa este jueves y sufrió una previsible derrota ante Golden State por 117-101. Es la cuarta caída consecutiva para los Nets, quienes a pesar de jugar ante su gente en el Barclays Center tenían uno de los compromisos más difíciles del calendario ante los Warriors.
Luis Scola no tuvo mucha participación en el choque de esta noche. Independientemente de que dos días antes había sido titular ante Toronto, esta vez el capitán argentino no estuvo en demasiada consideración para Kenny Atkinson. El ala pivote apenas jugó 3 minutos, tiempo en el cual arrojó 2 puntos (1/1 en dobles), 1 rebote, 1 pérdida.
Las figuras de la noche fueron Kevin Durant y Klay Thompson. El primero de ellos tuvo una labor descollante con 26 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias, siendo claramente el eje de los Warriors dentro del partido. Thompson tampoco se quedó atrás y anotó 23 tantos. Stephen Curry y Zaza Pachulia anotaron 15 unidades cada uno.
Brook López fue el mejor exponente de Brooklyn con 28 puntos, pero teniendo en cuenta que su segunda mitad no fue nada positiva. López había ingresado al entretiempo habiendo convertido 23 unidades, pero en el complemento se secó y fue víctima del bajón que sufrieron los Nets.
La historia había comenzado bastante pareja para sorpresa de muchos. De hecho, los Nets llegaron a imponer su juego en el segundo capítulo y se convirtieron en el foco de atención tras encajar un parcial de 31 a 16. Sorprendentemente, los neoyorkinos entraron al descanso largo con ventaja de 65-49.
Pero todo cambió en el tercer periodo, con unos Warriors enormemente intensos que pisaron el acelerador y liquidaron a los Nets. Aquel capítulo se lo llevaron por 39 a 19 para dar vuelta el curso del marcador y pasar a ganarlo por cuatro unidades (88-84), mientras que en el último periodo también volvió a dominar para terminar ganando con comodidad: carrera de 29 a 17 y 117-101 definitivo.