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Los representantes argentinos siguen sumando adeptos alrededor del mundo. Además de los jugadores, los entrenadores albicelestes son muy buscados en distintas competencias. En América hay dispersos por varios países.

Daniel Cano es uno de los casos. El formoseño, tras su experiencia en la Liga Nacional dirigiendo a La Unión, se fue a Paraguay a dirigir. Creó un imperio en San José, ganó en reiteradas ocasiones la Liga Nacional doméstica y lo hizo con su hijo, Benjamín, como asistente.

Pero, como dice el dicho, los chicos crecen. Benjamín vivirá su primera experiencia como entrenador principal y lo hará al frente de Félix Pérez. Además seguirá trabajando junto a su padre ya que Daniel dirigirá al seleccionado nacional en la Ventana FIBA de cara a la clasificación a la Americup 2025 y Benjamín será su asistente.

Benjamín tendrá a otro argentino como asistente: será Lucas Aballone. Un joven misionero que estuvo al frente del seleccionado provincial en varias ocasiones y que está trabajando fuera de Argentina hace algunos años.