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La tercera fue la vencida nomás. Quimsa de Santiago del Estero había jugado la final de la Liga Nacional de Básquet de Argentina en las dos temporadas pasadas y alcanzó la de 22/23 jugando en gran nivel. Cambió de entrenador en el medio del año, llegó Leandro Ramella tras la salida de Manuel Córdoba y el equipo se potenció.

Uno de los pilares fundamentales del equipo fue Mauro Cosolito. El oriundo de Santa Fe lleva cuatro años en el club, al cual llegó con el firme objetivo de poder cumplir su sueño de ser campeón de la Liga Nacional.

Logró varios títulos, campeón de la Basketball Champions League, del Súper 20 y de la Recopa, pero la espina seguía ahí: la Liga Nacional se le hacía esquiva. Pero, finalmente, en la temporada 2022/23 pudo sacarse la espina y conseguir el título por primera vez en su historia y darle una estrella más al club santiagueño.

Mauro hace varios años que viene en ascenso, había logrado subir al TNA desde el Torneo Federal con Unión de Santa Fe y desde ese momento no paró de crecer. Se convirtió en el Mejor Sexto Hombre en la temporada 2015/16 defendiendo la camiseta de Olímpico de La Banda y luego dio el gran salto, se convirtió en titular, se fue haciendo su nombre hasta convertirse en un jugador franquicia. Hoy, líder de este Quimsa campeón, nos atendió y pudimos dialogar un rato con él luego de los festejos por la obtención de la Liga Nacional.

-¿Cómo analizas el título?
. Primero, desde un lugar de felicidad, de merecimiento, de trabajo realizado. No solo como el título de esta temporada, sino de todo el proceso. O que personalmente estuve en el club que son cuatro años: el primero veníamos líderes y se terminó por pandemia y en los otros dos perdimos la final. Esto es la estrella que le faltaba a estos cuatro años de proceso. Era el momento esperado por todos, soñado por todos. Lo analizó así, desde la superación, dejar atrás obstáculos, superar a la derrota, que el club apueste a más, que nosotros apostemos a más. Creo que es eso, la felicidad, el merecimiento, cuatro años de mantenernos arriba, no rendirnos. Llegó. Lo logramos. Lo logré. Eso es lo que me pone más feliz.

-¿Cuáles crees que fueron los puntos altos del equipo?
. Desde que encontramos los roles y cada uno supo lo que tuvo que hacer para brindarse al equipo, tuvimos un equipo largo, con mucha rotación y eso nos hizo un equipo largo. Eso nos ayudó en todo el año. Perdimos diez juegos, en solo perdimos uno. Una de las fortalezas fue que cada uno estuvo bien, con jugadores que ya tienen mucha experiencia, eso nos mantuvo derechos y en el camino. Además, tener un equipo tan largo, es muy beneficioso.

-¿En qué momento de tu carrera llega este título?
. Era un momento muy esperado. Lo esperaba, lo quería, lo soñaba. Sabía que si seguían pasando los años, cada vez se iba a complicar más. Llega en un momento justo, me siento muy bien, maduro en muchas cosas, con muchos amigos para disfrutarlo, con mucha gente cerca que me quiere, eso hace que lo valore el doble. Era necesario para cumplir mi sueño. Es el momento justo.

-¿Qué importancia tiene personalmente para vos?
. Es muy superadora. Siempre lo dije, levantar la copa de la Liga Nacional era mi sueño. Luché todos los días desde hace mucho. En Olímpico, varias temporadas, estuvimos arriba, peleamos, luchamos pero no habíamos podido. Después en Quimsa con tres años seguidos jugando finales. Lo había soñado siempre, lo había buscado. Me levanté cada vez que caímos, nos hicimos más fuertes y la importancia es total. De a poco fui contestando mensajes y muchos me decían: ‘Lo merecían, lo merecías’. Pero esto no se merece, se gana. Así que estamos muy contentos.

En lo personal, fue cumplir mi sueño. Hacer el trabajo para cumplir mi sueño. Perseverar, persistir. Con mucha que me quiere alrededor, muchos amigos, que te completa y se pone feliz por verme feliz, es lo mejor de todo.

-¿Era la consagración que te faltaba en tu carrera?
. Quiero más. No me quiero conformar y quedarme con esto. Pero sí es una de las más importantes. Habíamos ganado la Basketball Champions League, el Súper 20, una Recopa, pero todos queríamos el título de la Liga Nacional. Desde el primer día que llegué al club, lo dije y quizás por eso tanta gente me saludó y me dijo que era mi sueño, lo que quería, lo que faltaba, porque es lo que siempre soñé. Era lo que faltaba, pero somos deportistas y queremos seguir compitiendo y seguir ganando, habrá que poner nuevos sueños y objetivos en el futuro para poder cumplirlo.

-¿Qué significa Quimsa en tu carrera?
. Ufffff, qué pregunta. Quimsa… La verdad que Quimsa es un club muy grande, che. Verdaderamente te pone a otro nivel. Es un club muy existe, con una sociedad que te brinda todo como es la de Santiago, es una sociedad que está muy pendiente y muy abierta con uno. Quimsa te da otro target, es un club muy grande, le hace muy bien a la Liga Nacional y pone a las personas a otros niveles, hace crecer a los jugadores en un nivel exponencial. Tenés que estar muy preparad, tenés que venir a competir todos los días, tenés que venir a ganar cosas. 

Traté de ponerme en un nivel de liderazgo, como de compromiso, de práctica, físico, mejor de lo que venía. El club sin quererlo te exige todos los días y te pone la vara muy alta. Estar a la altura de Quimsa la verdad que no es poco y estoy orgulloso de eso. En mi carrera fue fundamental y fue un quiebre. Orgulloso de estar en el club, de ser parte de la historia, de darle al club lo que quería y que el club me haya ayudado a mi a cumplir mi sueño. Muy agradecido a Quimsa por todos estos años.

Federico Radulovich / [email protected]
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