Basquetplus.com

Larry Bird es un ícono de Boston Celtics. De los más grandes. De no ser por Bill Russell, probablemente el mayor de todos. Por eso, su relación con la ciudad, con el equipo y con el mítico Boston Garden (ya demolido), siempre fue estrecha. 

El 15 de mayo de 1992, a los 35 años, Larry jugó su último partido en el Garden. Su espalda ya lo había abandonado y cada juego era una tortura. Igual, lo hizo en un buen nivel: 16 puntos y 14 asistencias, en la victoria sobre Cleveland 122-91, por la primera ronda de los playoffs del Este. Sirvió para igualar la serie en 3, que luego perderían de visitantes 104-122, en el que sería el último partido de la carrera de Bird. 

Tras el retiro, Bird integró el Dream Team que ganó los Juegos Olímpicos de Barcelona y quedó como asesor de los Celtics hasta 1997, cuando aceptó ser el nuevo entrenador de Indiana Pacers. Entonces se dio lo que hasta poco tiempo antes, nadie imaginaba: Larry llegando al Garden, pero como parte de un equipo rival. 

Eso fue el 18 de enero de 1998, aunque había cambios notorios en relación a mayo de 1992. El más importante: ya no existía el Boston Garden, demolido en 1997. Ahora la cancha se llamaba TD Bank North Garden y, si bien estaba al lado de la otra, era otra cosa. El asistente de Larry en los Pacers era el joven Rick Carliste, que paradójicamente había sido campeón con los Celtics, y con Larry, en aquel fantástico equipo de 1985/86 que derrotó 4-2 a Houston en la final. 

Recuerda Carlisle ese 18 de enero en el Boston Globe: "Recuerdo el momento en el que entró al parquet y la reacción del público. Fue como una reverencia. Y vimos cómo afectó eso a Larry. Miré a la cara a nuestros jugadores y noté que se pusieron serios, dándose cuenta de que ese partido había pasado a ser uno que había que ganar sí o sí. Veníamos jugando bien, pero eso fue una prueba". 

Los Pacers ganaron 103-96 y ese año llegaron hasta las finales de Conferencia, donde le dieron amplia batalla a los Bulls del Last Dance de Jordan, perdiendo en séptimo juego 83-88, luego de ir ganando por 12 en el primer cuarto y por 3 en el último.

Bird fue elegido entrenador del año en esa campaña, y siguió dos más en los Pacers, llegando a las finales en 1999/00 ante los Lakers, perdiendo 4-2 ante los Lakers de Shaq. Luego dejó y entre el 2003 y el 2017 fue ejecutivo, también de los Pacers, volviendo a ser elegido el mejor en lo suyo, en la 2011/12. Al Garden no volvió más como protagonista después de dejar el cargo de entrenador. Lo suyo, allí, pasaba por otro lado: por pasar la pelota naranja por adentro del círculo de fierro. Tan simple como eso.