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La sorprendente historia detrás del hincha que se tatuó a Campazzo

20:38 23/12/2020 | Se llama Sebastián Palonsky y decidió inmortalizar en su piel un gran momento de Facundo y del básquet argentino. Te contamos de qué se trata.

Campazzo inmortalizado (Foto: Chispa Tattoo)

Si hay algo que caracteriza a los argentinos es el fanatismo. La política, el deporte, el amor, nada queda fuera del repertorio criollo. El básquet, por supuesto, no es la excepción y a lo largo de la historia hubo hinchas que demostraron su devoción a un club, un jugador o una personalidad. Este es el caso de Sebastián Palonsky, quien decidió inmortalizar en su piel al gran Facundo Campazzo.

"Le dije a Chispa que me quería hacer algo por Facu, pero no sabía qué, tenía en mente el pecheo con DeAndre Jordan, pero no sabíamos cómo hacerlo, entonces a él se le ocurrió la idea con los anteojos de mosquito, y al toque le comenté que me encantaba", le contó a Básquet Plus el protagonista. 

El tatuador no es cualquiera, sino un reconocido en el mundo del básquet y de la tinta. Jugador amateur de este deporte, no precisó de mucho tiempo para sacar a luz su idea. "Sebi (como le dicen sus amigos) quería algo de Campazzo y enseguida se me vino esa imagen a la cabeza. Tenía muchas ganas y hasta estaba nervioso en que se parezca (dice Chispa entre risas), un poco aunque sea porque no hago realismo de retratos, por eso lo hice en ese estilo tipo vector", relató el materializador del sueño. 

Lo de Sebastián y los tatuajes de sus ídolos no es nuevo, a pesar de su corta edad: "Tengo tatuado el 20 de Manu (Ginóbili) también, siempre fue mi ídolo en todo lo que es el básquet, pero como tengo 21 años, no lo viví tan a pleno como a Facu... Además, mido casi lo mismo que Campazzo, entonces siento que el chabón de alguna manera te demuestra que todo es posible. Con 1.80 está por debutar en la NBA, una locura".

Al comienzo se sintió medio raro, incluso al ver el resultado. Pero todo cambió con un detalle. "Cuando Chispa lo terminó, no me terminaba de gustar, hasta que hizo el video ese con la espuma que subió a redes y ahí me volví loco, lo hizo igual, ¡es tremendo! Yo creo que el sintió algo parecido, no esperaba que quedara tan igual", confesó Sebastián.

Y así fue, el tatuador hizo su magia y desde la experiencia de su arte, más su amor por el básquet, logró destacarse. Campazzo seguramente algún día deje de jugar, pero su imagen y esa mirada cómica jamás se disipará. Facu, Chispa y Sebi, todos unidos por la naranja. No me digan que esto no es magia.  

 

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