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Bradley Beal es un jugador excepcional. Múltiples selecciones al All-Star, un reconocido anotador estrella y de una capacidad excelsa para ser la opción principal de un equipo. Sin embargo, en su larga etapa con los Wizards desde que fue drafteado en 2013, pudo demostrar pocas veces el impacto ganador que lleva dentro. 

Además, el escolta siempre rumoreado en traspasos cada verano se acostumbró a perder y estar en un equipo mediocre, pero como Lillard, siempre decidió quedarse. En el caso de Beal la 'lealtad' es algo cuestionada, y parece tener que ver más con el dinero extra que puede conseguir en Washington cada vez que termina contrato. Como los Wizards lo draftearon, pueden darle hasta un 15% más de salario que cualquier franquicia.

Sin embargo, su disponibilidad en el mercado ahora parece ser una realidad. Beal, en una entrevista con Marc J. Spears,  sugirió que está cerca del momento en el que no estaría dispuesto a esperar más. “Soy paciente, pero llega un momento en el que tengo que ser un poco egoísta y trazar una línea en la arena, seguro”, dijo Beal. Su contrato lo ata a los Wizards hasta la temporada 2025-26, con una opción de jugador para 2026-27. Cumplirá 33 años en 2026, por lo que es difícil verlo renovando allí tras este acuerdo.

Beal ha dejado claro que quiere ganar con Washington, y su nuevo contrato sí es muestra de ese compromiso. Sin embargo, también admitió que también pensó seriamente en jugar en otro lugar, habiendo estado muy cerca de llegar a Boston por su conexión con Jayson Tatum el verano pasado. Con el equipo actualmente sentado en un 31-35, este verano puede ser muy importante para el mercado de traspasos si Washington no logra entrar ni al play-in. Equipos como los Lakers ya están monitoreando la situación, lo mismo sucede con Chicago, que tiene sus propios problemas con Zach LaVine. 

Si bien no está claro que vaya a pedir su salida este verano luego de apenas una temporada de renovar contrato, es algo que sí está pasando en el tiempo reciente. Kevin Durant firmó un acuerdo con Brooklyn, y a la siguiente offseason ya pidió formalmente una salida. Los Clippers hicieron lo mismo con Blake Griffin años atrás, cuando lo enviaron a Detroit tras un acuerdo de 4 años. Si Washington no da señales de una estructura pensada para ganar, Beal tiene el porte en DC para demandar una salida.