Finales NBA

El análisis de Vadell, Milwaukee campeón: "Giannis, todopoderoso"

18:42 22/07/2021 | Diego Vadell cierra aquí su excelente análisis, distinto, más allá de lo táctico, de las Finales NBA. Pero volverá pronto: analizará a Argentina en Tokio. ¡Notición!

Giannis, el nuevo Dios griego (Foto Getty)
“Para el Sabio no existe la riqueza. Para el Virtuoso no existe el poder. Y para el Poderoso no existen ni el Sabio ni el Virtuoso”. Roberto Fontanarrosa.
 
El poder de Anteto fue imposible de contener, fue de menor a mayor y, lo más importante, fue de crecimiento constante. El día más importante de su carrera como jugador NBA tuvo porcentaje de tiro libres excelente, puso 5 tapas y metió cantidad industrial de tiros de 2 puntos de alta dificultad.

En la era del tiro de 3 acompañada del aumento de ritmo de juego, solo alguien distinto nos hará repensar nuestras muy recientes afirmaciones. Algo poderoso nos arrastró a las épocas del indetenible Shaquille O'Neal, y esto es la evolución. Indetenible dento del área cercana al cesto, demasiado rápido, demasiado hábil, defiende todas las posiciones y jamás especula ni regula su energía. Fue imponente lo de Anteto después de 2 discutidos MVP de serie regular. Cruza la línea del logro máximo, el campeonato, lo indiscutible, y se transforma con lo particular de su historia de vida en alguien lleno de épica. De vivir en la calle a ser MVP de la NBA. 


 
El héroe único, la estrella, nos distrae a veces, nos hace individualistas en un deporte de equipo, y todos estos colosos y los anteriores que estuvieron en ese lugar en diferentes temporadas o épocas necesitan una compañía, un contexto perfectamente pensado por muchos para poder explotar al máximo. Esos importantísimos componentes menos recordados ante tanta trascendencia del rendimiento de uno merecen al menos este párrafo. Giannis tiene grandes jugadores que lo rodean y tiene fuera del campo mentes que fueron mejorando temporada a temporada las decisiones para rodearlo y llegar aquí.

En un partido parejo, tenso, igual al anterior en su inicio, pero intercambiando roles, los Bucks en un primer cuarto disfrutaron de la comodidad de su localíaa y dominaron, pero cayeron peligrosamente su rendimiento después para que todo sea paridad hasta el final.

Me pareció que fue un partido más de rendimiento de jugadores que de alguna nueva estrategia o táctica aplicada. Llegar a estos partidos definitorios y que se combinen tus mejores jugadores es lo que logró Milwaukee, y la sincronización para ir calibrando a quien toma las riendas en cada momento del juego fue una ventaja de los Bucks, porque Middleton dominando la ofensiva desde el perímetro sobre los finales fue de una importancia clave. Holliday esta vez hizo otro trabajo importante, no el de ofensiva, pero limitó a las estrellas perimetrales de Phoenix, junto con Tucker, evitando tiros fáciles de 3 puntos y empujando con físico a que no se acerquen al cesto, pero siempre obligando a la acción con defensa contestada máxima.

Giannis mejoró la defensa del roll de Ayton, que lentamente y en degradé hizo caer elogios desmedidos. Lopez, Connaugton y Portis, aparecieron en momentos oportunos y llenando los vacíos que generaba esta final jugada un poco a la antigua, pensando que se tiraban menos de 30 triples por equipo. La progresión hacia arriba de la barra de autoestima de los de Milwauee hizo que ataquen mejor, convencidos que todo lo que hacían en defensa contra los grandes manejadores de balón y goleadores de Phoenix daría éxito al largo plazo. El largo plazo en un plan siempre es mérito del entrenador, cómo lo comunico, cómo lo afianzo, cómo lo ajusto para que el compromiso persista y termine siendo respetado hasta intimidar y frustar.

La juventud de Booker lo exime de muchas cosas y la principal es no haber tenido el partido que su equipo necesitaba para ganar, pero no estuvo lejos. Chris Paul tuvo un buen juego, lo ayudó, y se le escapó por poco, porque todo fue muy ajustado. Tal vez faltó una racha de talento en un momento clave, pero son deseos de algo que no pasó, pero a los 24 años estas derrotas te pueden endurecer la mentalidad e impulsarte para volver a intentarlo.

No me sale golpear en el piso a este equipo de Phoenix. Creo que fue fuerte, digno y que sufrió ausencias inesperadamente impactantes en el largo plazo como Saric y su versatilidad para mantener una dinámica constante y no ser monótonos en ofensiva.

Hablemos del gran Chris Paul para describir con un poco de humor lo difícil que debe ser para una estrella de este deporte que tiene las condiciones y da todo para lograr ser campeón y no lo logra. Volvamos a Roberto Fontanarrosa y un personaje de su creación: pensemos en los aforismos de Ernesto Esteban Echenique, ¨persevera y perseverarás¨. 

Disfrutamos de una excelente final de NBA. Hay nacimiento de nuevos dioses en este infinito universo del mejor básquet del mundo.

 
 

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