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Pocos, casi nadie, deben conocerlo como Mauro Lombardo. El mundo lo conoce como Duki, el trapero más importante de Argentina y con mucha aceptación en distintas partes del mundo. Pero antes de ser Duki y saltar a la fama como cantante de trap, fue jugador de básquet y fue su sueño frustrado.

Duki comenzó a jugar a los 8 años y, según cuentan quienes supieron verlo, tenía condiciones. Jugó en Almagro y en Villa Mitre, ambos clubes de Buenos Aires. En una entrevista con NBA Latam, el propio cantante expresó: "Me acuerdo que la jodía a mi mamá y le decía 'voy a jugar en la NBA'. Me federaron, empecé a jugar todos los domingos y tenía una fascinación por el deporte. Dejé de jugar a los 14 años, que es cuando ya tenés que entrenar un poco más exigidamente. Me empezó a aburrir el entrenamiento, dejé el basquet y le agarré resentimiento porque era mi sueño frustrado. Dejé de mirar la NBA”.

En un stream con Coscu, Duki reconoció quién era su ídolo en la NBA: "Ahora mi equipo favorito es Chicago Bulls. Me gusta el plantel, pero nunca me gustó Chicago. Soy re anti Jordan. Soy anti Jordan, anti LeBron. A mí los héroes no me caben” y luego agregó: "Me gusta Allen Iverson. Es el 1 de la historia”.

Duki tiene una gran relación con Facu Campazzo y en el último tiempo pudo cumplir su sueño de llegar a la NBA cuando fue llevado por la propia organización al All Star Game del 2022 desarrollado en Cleveland. Además tuvo intercambios con Manu Ginóbili, quien se mostró seguidor de la música del trapero.