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Manu Ginóbili fue uno de los jugadores icónicos de San Antonio Spurs. El bahiense generó gran atracción con los fanáticos texanos y muchos hinchas hispanos tuvieron al argentino como su ídolo y su jugador a seguir en la NBA.

La Manu manía fue muy grande, el Bahiense se convirtió en una gran figura. Su camiseta fue una de las más vendidas y su nombre uno de los más aclamados cada vez que San Antonio jugaba. Pero, los homenajes a Manu no fueron solo esos.

Además de las ovaciones, las camisetas, los tatuajes, hubo uno que superó todos los límites. En 2015 cuando estaba preparándose para un encuentro ante Utah Jazz, recibió una gran sorpresa. Una familia se acerca y un joven de 10 años se presenta: “Mi nombre es Ginobili Jose Rey San Miguel-Ramirez”. 

Oriundos de México, los padres del jovencito expresaron que ya tenían tres hijos, todos con nombres empezados con la letra G y buscaban uno que siga con esa regla y comenzaron a bromear con ponerle Ginóbili. La broma se hizo realidad y terminaron por ponerle ese nombre.

"Lo mejor de haberle puesto Ginóbili es que lleva el nombre de alguien tan ejemplar” expresó la madre. Mientras que el niño comentó: "Ginóbili es el mejor jugador de la NBA. Él es la razón por la que me apunté a un equipo de básquet". 

El propio Manu, que se vio sorprendido por el niño, expresó, entre risas: "Estudiá mucho, eh. Mirá que tenés que dejar bien parado el nombre que llevás. Hay que honrarlo”.