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Facundo Campazzo tuvo una temporada que rozó lo infinito. En total, sin contar los amistosos de los Nuggets ni los de Argentina en Las Vegas, fueron 101 partidos oficiales entre Real Madrid, Denver y la selección.

Dio el salto a Estados Unidos tras firmar un lucrativo contrato con la Casa Blanca y poco a poco terminó ganándose un lugar en la rotación de Michael Malone, robándose los Top-10 de asistencias y logrando la fama de ser un luchador dispuesto a realizar siempre el trabajo sucio.

Justamente por este motivo el NBA 2k22 lo homenajeó con una insignia llamada Hustler, que se define como la “habilidad para conseguir los balones divididos más rápido que los oponentes”.

Pero, ¿qué hay detrás de ese talento que el juego de básquet más popular del planeta decidió conmemorar? La NBA mantiene ese factor en datos a través de las estadísticas de lucha (Hustle Stats) en las que se contabilizan aspectos tales como las faltas ofensivas producidas, los desvíos y los box-out, entre otros.

La sensación de insoportable de Campazzo en cada pelota 50/50 no quedó solo en la vista de cada fanático y en algunas de esas estadísticas de lucha fue uno de los mejores de la liga… en su primera campaña en Estados Unidos.

Por ejemplo, en los desvíos cada 36 minutos, que premian los momentos en los que en cualquier lugar de la cancha un defensor hace que la pelota vaya en una dirección diferente a la que pretendía el jugador ofensivo, fue el cuarto mejor de la temporada con un promedio de 4,4 por encuentro.

(Foto: NBA) 

Lo mismo a la hora de evalúar los balones recuperados cada 36 minutos, en donde se ubicó en el mismo puesto junto con Jimmy Butler, con una asombrosa media de 1,3.

Pies inquietos, manos hábiles, capacidad psicofísica distinta al resto, lectura y asfixia fueron las claves para Campazzo y la situación se incrementa si se lo compara con el resto de los novatos de su clase, siempre explicando que el cordobés es un rookie completamente divergente al resto.

Nadie consiguió más desvíos que él en la 2020/21, con un total de 176 que distan mucho de los que lograron sus escoltas, Jae'Sean Tate y LaMelo Ball, con 151 cada uno, y solo cuatro debutantes recuperaron más pelotas (54).

La alta tasa de faltas fue un factor que le jugó en contra, pero Campazzo tendrá una nueva temporada en la NBA, en la que ya estará más cómodo con los tiempos, los momentos y las situaciones en las que explotar sus virtudes defensivas.

Falta poco para verlo. No se levanten de sus asientos que ya empieza, de nuevo, lo bueno. De Argentina, para el mundo. Nuestro Facundo. 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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