Basquetplus.com

Eduardo Nájera fue, es y será una institución en México. No solo se mantiene como el único jugador de su país en haber sido seleccionado en el Draft de la NBA (en el pick 38 por los Rockets en el 2000), sino que también tuvo el placer y el privilegio de enfrentarse, conocer y, sobre todo, compartir equipo con el legendario Michael Jordan.

Durante su estadía en la liga norteamericana, el mexicano vistió las camisetas de los Mavericks, los Warriors, los Nuggets, los Nets y los Bobcats, franquicia en la que se retiró en la temporada 2011/12. Curiosamente, en ese último conjunto Jordan era el dueño mayoritario, y el interno y el exescolta pudieron disfrutar de un tiempo juntos.

Era común verlo a Michael ponerse los cortos y jugar partidos contra los integrantes del plantel. También era usual el trash-talk y alguna que otra cargada. Durante esa época ocurrió, por ejemplo, el episodio con Stephen Jackson, que aprendió en primera persona qué pasaba cuando Jordan se enojaba.

Pero todo era recíproco y Jordan también se bancaba algunos chistes. Uno de ellos se lo propinó el mismo Nájera y la divertida anécdota la recordó en una entrevista para el portal de la NBA en México. 

“En una práctica, hubo una jugada y Michael estaba viendo todo. Tuve una jugada, hice una finta de tres puntos, un pique, salté y creo que fue Gerald Wallace el que me intentó taparme, pero me elevé a clavar el balón dentro del aro con fuerza y fallé. Jordan estaba riéndose al lado y empezó a decirme: 'Eduardo ya estás viejo, ya no podés saltar, ya no podés hacer eso, jugácon tus fortalezas'. Empezó un poco burlarse de mí, lo cual está bien, no lo tomé un insulto, para nada. Viene del mejor jugador del mundo y acababa de hacer presencia en ese entrenamiento y le dije tenés razón, ya no puedo saltar, tengo que tomar el tiro de tres puntos", comentó detalladamente el mexicano.

El asunto parecía finalizado, pero nada de eso pensaba Nájera, que se vengó con el propio veneno del 23: "Ya se había terminado la práctica, estaba tirando cerca del aro. La mejor anécdota que tengo con él, lo vi, agarré el balón, salté y se la clavé por detrás. Lo hice, pero físicamente le pongo el antebrazo en la espalda, la clavo y se da vuelta a ver, pregunta que qué está pasando. Le dije, todavía la puedo clavar, sí puedo saltar todavía y, por cierto, acá tengo el video, lo voy a poner en YouTube”. 

La escena fue invadida por risas y la diversión fue una misa. Michael y Eduardo, al mejor estilo del trash-talk. El mexicano le hizo tomar la medicina que el norteamericano había inventado. Por suerte, al final Nájera lo calmó con una simple frase: “Era una farsa, no estaba grabando. Me dijo que no, le dije no te creas, te quería demostrar que sí podía saltar. Así fue como me desquité con él". 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14