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Pablo Prigioni tuvo seguramente su partido más determinante desde su llegada a los Clippers y fue importante para que su equipo consiguiera ante Miami, su décimo triunfo de forma consecutiva, al imponerse por 104 a 90.

Aunque sólo estuvo 15 minutos en cancha y tomó un único disparo al aro (convertido), el aporte defensivo de Prigioni fue sobresaliente: 8 recuperos de balón, en un promedio de más de un robo cada dos minutos.

Un dato curioso: Prigioni es el primer jugador en la NBA en robar al menos 8 pelotas en menos de 20 minutos, desde que su entrenador, Doc Rivers, lo hizo en 1991.

Miami había comenzado mejor el partido, tomando una rápida ventaja de 25 a 17 en el primer cuarto. Sin embargo, de a poco Los Angeles se fue metiendo en la historia y tras un segundo parcial favorable (28-27), recortó minimamente la brecha para el entretiempo: 52-45 abajo.

Lo mejor de los Clippers, que sumaron su novena victoria seguida sin Griffin (tampoco jugó Jordan), se vio en el tercer período: gran defensa y todavía mejor ataque, para no sólo dar vuelta el marcador, sino que hasta pasar a comandar con cierta comodidad: 79-69.

En el último cuarto, Miami ya no tuvo respuesta y los dirigidos por Rivers mantuvieron su gran momento, con el 104 a 90 final. El presente de los angelinos sigue siendo alentador y parecen haber encontrado una química, que ojalá no cambie cuando regrese su figura.

El goleador de los Clippers fue Cole Aldrich con 19 puntos y 7 rebotes. Además, Paul Pierce, Chris Paul y Jamal Crawford, sumaron 15 unidades cada uno. En Miami, no alcanzaron los 19 tantos de Gerald Green.

Pablo Prigioni: 2 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias, 1 falta cometida, 8 robos, 1 pérdida y 1-1 en dobles durante 14:53 minutos de juego.