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Al final de cuentas termina siendo básicamente una cuestión de egos. ¿Cuánta diferencia habrá en la vida de Luka Doncic si en lugar de ganar 345 millones de dólares en 5 años gana 250? Sí, claro, 95 menos, pero la realidad es que el esloveno ya embolsó casi 150 con este año incluido y no tendrá problemas de dinero ni él ni varias generaciones si no hacen un lío muy grande. Y si lo hicieran, esos 95 millones de diferencia los perderían también. 

Así las cosas, fue tema de discusión el dinero que dejaría de ganar Doncic porque, al ser traspasado, ya no podría exigir el supermax que sí podía llevarse en Dallas y que eran esos 345 millones. Con los Lakers, igual, tiene 3 opciones diferentes, todas multimillonarias, pero que solamente hablan del tema salarial. Lo importante acá, sin embargo, es lo otro. Lo de afuera. El extra que signifca para una estrella como él llegar a Los Ángeles, y para jugar con LeBron James. 

El diario As de España habló con Quique Villalobos, representante de Luka desde que estaba en el Madrid (lo es también de Facu Campazzo ahora), y el exjugador lo reconoció bien clarito: "Nosotros tenemos ya una estrategia para que con el tiempo recupere ese dinero. No lo va a perder, simplemente se va a posponer. Luego, alrededor de Luka, hay muchas otras opciones, muchos otros tipos de ingresos de marketing y comerciales que, evidentemente, se van a potenciar. No es lo mismo el número de zapatillas que vendes en China cuando estás en Dallas a cuando estás en los Lakers. Y ya ha habido tres o cuatro marcas de comidas conocidas y de otros sectores que ahora mismo están como locos por alcanzar un acuerdo. Maximizar financieramente este movimiento no va a ser complicado".

La lukamanía recién empieza en Los Ángeles. Todavía no pisó la cancha del Crypto.com Arena y ya es un huracán. Si hoy o el miércoles debuta finalmente, nada cambia. El proceso está en marcha. Ya no hay forma de detenerlo.