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Willis Reed fue una de las mayores estrellas en la historia de New York Knicks y falleció a los 80 años. El interno fue una enorme estrella y llevó a la franquicia de la Gran Manzana a la final de la NBA. Enfrente tenía a los Lakers, con Wilt Chamberlain como la figura estelar.

Luego de pasar por la Universidad de Grambling, fue elegido en la posición 8 del Draft. Debutó en 1964 en los Knicks, donde se mantuvo a lo largo de diez temporadas como profesional. Logró dos anillos, en la 1969-70, y en la 1972-73, logrando sendos MVP de la definición.

Cerró su carrera como profesional con 650 partidos y promedios de 17.6 puntos y 12.9 rebotes. Además, disputó siete veces el All Star Game y dejó una marca en la NBA.

Entre otros premios también logró el Rookie del Año en 1965 y el MVP de la temporada regular en 1970. Ya con las lesiones en sus rodillas haciéndolo sufrir, se retiró en 1974 y poco tiempo después comenzó su carrera como entrenador, que lo tuvo dirigiendo a sus Knicks y luego a los Nets, en lo que fue su último trabajo en los banquillos, pasando previamente como asistente en los Hawks y los Kings.

Además, fue ejecutivo de varias franquicias y su último cargo había sido hasta 2007, cuando fue vicepresidente de operaciones de New Orleans Hornets. Fue elegido entre los mejores de la historia tanto en los 50 como en los 75 años de la NBA y también fue inducido al Hall of Fame. Se fue la mayor leyenda de New York.