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Shaquille O’Neal es uno de los mejores jugadores de la historia de la NBA, determinante y dominante como pocos en la zona pintada, con sus 2.16 metros de altura asustaba a cualquiera. Pero no a todos, o por lo menos no a la Guardia Real de Londres.

Shaq recordó que estaba de viaje en Inglaterra con un amigo y paseando por Londres decidieron apostar 50 mil dólares. ¿Cuál era la apuesta? O’Neal, reconocido también por su sentido del humor, le dijo a su amigo que iba a hacer reír a la Guardia Real. Éstos suelen estar muy serios cuidando los alrededores de los palacios y los lugares importantes de Inglaterra.

Según el propio Shaq relató, le hizo muecas y burlas en reiteradas ocasiones, con el error que en la última de ellas tocó sin querer a uno de ellos. “Apenas lo empujé, salieron de la nada, me agarraron y me llevaron a una habitación trasera”, contó O’Neal.

Pero lo más gracioso fue cómo logró salir de esta situación: “Usé el nombre de David Beckham para salir. Les dije: ‘Escuchen, vayan a decirle al Príncipe Carlos que aquí está el Beckham negro, lo lamenta y no volverá a suceder’”. Por último, agregó: “No se si resultó o no, pero el tipo vino 10 minutos después y me dejaron ir”.