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El seleccionado estadounidense presentó, en varias ocasiones, equipos plagados de estrellas en las distintas competencias internacionales que afrontó. Tras las duras caídas en los Mundiales de 2002 y 2006 y en los Juegos Olímpicos de 2004, fueron a recuperar la gloria perdida.

En 2008 presentó un plantel plagado de figuras y estrellas, con Mike Krzyzewski como entrenador con gran puño para poder acoplar a los egos de cada uno de ellos. Así fue que en Beijing estuvieron citados dos grandes estrellas como Kobe Bryant y LeBron James. Escoltados por Dwayne Wade, Carmelo Anthony y Chris Bosh, con Jason Kidd como jugador experimentado y director de orquesta.

Krzyzewski, entrenador del mencionado equipo, recordó una situación que se vivió en el primer entrenamiento y expresó: "Jason Kidd, primera práctica, nuestro capitán, Salón de la Fama, liderando un ejercicio de corte rápido. Dwyane Wade está en un carril, LeBron está en otro. Y la pelota va a todas partes, pérdidas, errores, equivocaciones”.

Enseguida agregó: "Los reúno y les digo que no podemos jugar así. Entonces Kidd expresa: ‘Entrenador, trataré de hacer mejor las cosas. Disculpas’”. Por último, Mike sentenció: “Inmediatamente todos, encabezados por Kobe, LeBron y Wade expresaron: ‘No, no, no. Nunca jugamos con vos, con un talento como vos. Nosotros nos vamos a adaptar a tu forma de jugar’. Fue sencillamente fantástico”.