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Facundo Campazzo emprenderá el regreso a Europa de la mano del Estrella Roja y será un argentino más que haga el camino de vuelta al Viejo Continente luego de haber jugado en la NBA. Y por eso repasaremos cómo le fue a cada uno de los albicelestes que fue y volvió, y cómo fue su rendimiento.

Pepe Sánchez tuvo sus primeras temporadas como profesional en la NBA con Atlanta y Philadelphia, para irse al Panathinaikos en la temporada 2001-2002, con quien ganó la Euroliga en esa campaña en una recordada final ante el Kinder Bologna de Manu Ginóbili. A la temporada siguiente decidió volver a probar suerte en Detroit, para regresar al Alicante y luego al Unicaja Málaga, donde logró la Copa del Rey en 2005 y la Liga ACB en 2006.

El Colo Wolkowyski debutó en la NBA en Seattle y luego, en la 2001-02, pasó al CSKA Moscú, para después regresar a Boston. Allí fue su última experiencia en Norteamérica, para volver y hacer una carrera larga en Europa, con pasos por España, Grecia, Rusia, Polonia e Italia.

Carlos Delfino hizo el camino a la mejor liga del mundo en 2004 hacia Detroit proveniente del Fortitudo Bologna. Luego de cuatro temporadas, decidió irse en la 2008-09 al Khimki ruso por una campaña. Al término de ese año volvió a la NBA, donde jugó otras cuatro temporadas en Milwaukee y Houston, donde tuvo su maldita lesión en el pie.

Walter Herrmann fue otro de los que llegó a la NBA, en su caso en 2006 desde el Unicaja Málaga, donde se fue siendo gran figura. Llegó a unos Bobcats que tenían sus primeros años en la liga y luego pasó por Detroit, para volver en 2009 al Baskonia, donde logró el título de la Liga ACB, justo antes de decidir retirarse por primera vez.

Chapu Nocioni es, quizás, quien mejor rindió en su regreso al Viejo Continente. Chapu jugó en la NBA con gran suceso en Chicago, Sacramento y Philadelphia, para volver al Baskonia en 2012, donde tuvo tal rendimiento que llamó a su puerta el Real Madrid. Sus años en la Casa Blanca son historia conocida, ganando todo lo que tenía a su paso y hasta logrando el MVP de la Final Four de la Euroliga en 2015. Allí jugó hasta el 2017, cuando dijo adios al básquet.

Pablo Prigioni se convirtió en 2012 en el novato más veterano de la NBA con 35 años al llegar a New York. Entre su paso por los Knicks, los Clippers y los Rockets, el cordobés jugó cuatro campañas antes de decidir su vuelta al Baskonia en 2016. Allí sorprendió al poco tiempo y en enero del 2017 anunció su retiro como profesional.

Nico Laprovittola tuvo un paso por el Lietuvos Rytas y Estudiantes de Madrid antes de probarse en la NBA de la mano de San Antonio. Luego de solo 17 partidos, el argentino fue cortado por los Spurs y debió volver al Viejo Continente, recalando primero en Baskonia y luego en el Zenit. Su verdadero nivel se vio en 2018 y 2019 en el Joventut y en la actualidad transita sus mejores actuaciones en el Barcelona.

Los dos casos más recientes son los de Gabriel Deck y Luca Vildoza. El santiagueño probó suerte en Oklahoma City y decidió volver al Real Madrid, donde es pieza clave en el equipo de Chus Mateo y viene de consagrarse en la Liga ACB la pasada temporada. El marplatense luchó por su lugar primero en los Knicks y luego en los Bucks, para decidir su vuelta a Europa, donde ahora es la principal figura de un Estrella Roja que espera con los brazos abiertos a Facu Campazzo.