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La relación del Papa Francisco con el deporte siempre estuvo ligada al fútbol. Su pasión por San Lorenzo es ampliamente reconocida y se popularizó aún más en 2014, cuando el Ciclón se consagró campeón de la Copa Libertadores, un año después de que Jorge Bergoglio fuera nombrado Papa. También tuvo encuentros con Maradona y Messi, que demuestran que, como gran parte de la población argentina, era un apasionado del fútbol.

Sin embargo, también ha tenido varios momentos que lo vincularon con otro deporte sumamente popular como el básquet. Jugadores de la NBA visitaron el Vaticano para debatir sobre la justicia social, entre ellos Marco Belinelli, Kyle Korver, Sterling Brown, Jonathan Isaac y Anthony Tolliver.

Existen imágenes del Papa jugando con una pelota de básquet, además de algunas generadas con inteligencia artificial. Los Harlem Globetrotters lo visitaron, le obsequiaron una camiseta con su nombre y, para cerrar el encuentro, intentaron enseñarle a girar el balón sobre su dedo índice. Durante su gira, en la Plaza San Pedro, el jugador Flight Time hizo girar la icónica pelota roja, blanca y azul e intentó colocarla en el dedo de Francisco, quien no logró mantener el movimiento, pero dejó un gran momento junto a los Globetrotters.