Basquetplus.com

El Grupo F del Mundial 2023 tiene un atractivo muy específico: salvo Eslovenia, los tres conjuntos participantes están a tiro de obtener esa segunda plaza para seguir avanzando de la fase preliminar, y ninguno para ser el claro favorito.

Sería realmente una sorpresa que el equipo de Luka Doncic no clasifique primero, algo que le pasó en el Eurobasket pero ante una Alemania muy competitiva. En este caso, nadie parece ser una amenaza a ese primer puesto, pero para el segundo hay mucha competencia.

Georgia, con un talento descomunal de jugadores en la élite europea, además de dos NBA que en el básquet FIBA deberían ser dominantes, parece tener una pequeña ventaja en cuestión de jerarquía. Shermadini, Shengelia, McFadden y compañía cuentan con Mamukelashvili y Bitadze como opciones jóvenes, talentosas y con rodaje.

Sin embargo, no se puede descontar a Venezuela, La vinotinto hizo méritos para llegar al Mundial y mostró que aún le sobra en el tanque a sus veteranos para seguir llevando su bandera a la élite mundial internacional. Con el argentino Fernando Duró en el banquillo, pocas selecciones tienen un entrenador de semejante capacidad para cambiar un juego.

Por último lugar, Cabo Verde también quiere seguir haciendo historia en su primera Copa del Mundo para la nación, que es liderada por Edy Tavares. Si bien no tiene la profundidad, tiene la jerarquía total del mejor pivote en toda Europa, y eso será invaluable para su juego interior. Desde ya que no se espera que de una sorpresa, pero nada está descartado ante tanta paridad.