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La Generación Dorada fue el mejor equipo argentino de básquet de la historia, no solo nacional sino también internacional, consiguiendo logros muy importantes y fue un largo período el que logró mantenerse en la elite. Quizás también fue uno de los mejores representativos nacionales por equipos argentino.

Uno de los grandes exponentes de ese recordado equipo fue Luis Scola, el exjugador estuvo como invitado en el programa “Caja negra” y habló, entre otros temas, sobre la Generación Dorada. Fue consultado sobre el momento en el cual dio inicio ese proceso y el excapitán expuso: “A mi forma de ver hubo dos momentos claves. El primero cuando vamos a jugar un Mundial U22 en Australia en 1997, en ese equipo estaba Manu, que al principio no estaba, además estaba Oberto, Victoriano, Sánchez, Palladino, Gutiérrez, Fernández”.

Luego agregó: “Fuimos a jugar el Mundial y este equipo era diferente, ya se veía que era diferente”. Enseguida expresó: “En la preparación fuimos a jugar un amistoso contra la selección mayor que estaba preparando otro torneo y los reventamos. No me acuerdo si ganamos o perdimos, pero le jugamos sin ningún respeto. Incluso, aunque parezca desagradable, pensando ´pero estos quiénes son’”.

Más tarde comentó: “Nosotros estábamos en nuestro mundo, volábamos. Te cuento esto y me da vergüenza porque eran los mejores jugadores nuestros, hicieron cosas increíbles, pero en ese momento los queríamos pasar por arriba, les decíamos cosas, le contestábamos, le gritábamos los puntos. Ahí se veía que ese equipo era otra cosa”.

Luego expresó: “Perdemos la semifinal contra Australia, que después fue campeón, por un punto con un triple sobre la chicharra. Lo metieron desde adelante del banco nuestro, a un metro de distancia de donde estaba yo. Eso nos quedó muy marcado”.

Por último contó cuál fue el arranque definitivo de la Generación Dorada. “Yo pongo el año 1999 como el año 1 de lo que después fue la Generación Dorada. En ese momento, muchos de los jugadores que integramos ese equipo en Australia, fuimos a jugar con la selección mayor porque hubo alrededor de 15 deserciones en el equipo y Julio Lamas llevó un plantel lleno de jóvenes. Recuerdo que había mucho pesimismo, que no se iba a conseguir ninguna victoria más, nada. Pero fuimos, jugamos muy bien, le ganamos a Puerto Rico y terminamos perdiendo la clasificación contra la Canadá de Steve Nash”.