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Aíto García Reneses, el formador de grandes estrellas

08:58 20/02/2023 | El legendario entrenador de 76 años, lleva cinco décadas en la función y pulió a muchos diamantes. El alemán Franz Wagner, es la última aparición.

Aíto García Reneses, el formador de grandes estrellas

Muchos entrenadores lograron quedar en la historia grande por sus consagraciones, sus logros pero son pocos los que lograron perdurar tanto en el tiempo como lo hizo el español Alejandro García Reneses, más conocido como Aíto. 

El oriundo de Madrid fue jugador de básquet durante una década pero en los últimos años de su carrera, en Barcelona, comenzó su etapa como entrenador en 1972 en el club Esparreguera. Estuvo un año y luego partió al Círculo Católico de Badalona, allí pasó una década, posteriormente se hizo cargo del Badalona, desde 1983 al 85.

En 1985 dio inicio su larga etapa en Barcelona, allí se convirtió en un consagrado entrenador consiguiendo una gran cantidad de títulos nacionales e internacionales. Luego volvió a Badalona, tuvo paso por Málaga, Sevilla, Gran Canaria, Alba Berlín de Alemania y Girona, en el cual está dirigiendo actualmente.

Lleva cinco décadas como entrenador y formó grandes estrellas, cómo Tomas Satoransky, Kristaps Porzingis, Joan Sastre, Nikola Radičević, Ondřej Balvín, Ricky Rubio, entre otros. La última joya que tuvo en sus manos fue el alemán Franz Wagner, a quien tuvo en su etapa en el Alba Berlín.

Tiempo después, Aíto dijo en una nota: "Fue un placer entrenar a Franz Wagner. Con 16 años y 2.06 de estatura era capaz de jugar por fuera por su buena cabeza y su inteligencia”. Por su parte, el jugador expresó: "Con 16 años iba muchísimo a entrenar con ellos y cuando cumplí 17 pasé a formar parte del primer equipo. Jugaba unos minutos en cada partido”.

Además, dirigió a otras grandes estrellas y las hizo debutar como a: Pau Gasol, Juan Carlos Navarro, Rudy Fernández, entre otros. Aíto, desde hace cinco décadas se destaca como uno de los mejores entrenadores de la historia, demostrando que no necesita ir a la NBA para poder dirigir a grandes estrellas mundiales. 

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