Una imagen vale más que mil palabras. Si bien no cambiaba demasiado la situación porque Libertad perdía por dos puntos, todo fue muy bizarro en el final en Asunción entre Olimpia y el Tigre. Los paraguayos tenían 6 jugadores en cancha para la última reposición y los árbitros no revisaron la jugada. Sebastián Saborido habló con nosotros y contó la situación. Hoy va ante Quimsa en el choque de argentinos desde las 18.15.
"Fue una lástima que no alcanzó pero estoy orgulloso del equipo que es muy joven. Con respecto a lo del final fue un bochorno innecesario. Los jueces revisaban y listo".
-¿Te pasó alguna vez en tu carrera? ¿Les dijeron algo los árbitros?
-No algo así jamás. Generalmente los jugadores solos se dan cuenta de que hay más de cinco en cancha. Fue una situación que empañó toda una fiesta. Los árbitros se fueron corriendo y se encerraron en el vestuario. Nadie nos dio ninguna explicación, lo único que queríamos era que se revisara. Al no tener respuesta se empezó a caldear el ambiente, pero fue todo innecesario, incluso el tiempo muerto que pidió Olimpia con una décima en el reloj. Igual creo que no fue a propósito.
-¿Cómo se hace para sacar la cabeza de ese final e ir para adelante?
-Ya hay que salir de ese lugar y enfocarse en lo que nos queda ahora. Desde el comienzo tuvimos problemas porque nos costó el viaje de 18 horas por un problema en la aduana, aunque no es excusa. Espero que nos recuperemos de la mejor manera para jugar con Quimsa.
-¿Qué evaluación hacés de lo que va de la temporada?
-Es positiva porque somos un grupo con muchos jóvenes y sin jugadores de tanto renombre. Además tenemos un solo extranjero y eso es meritorio. Estamos conformes y contentos hasta ahora, aunque sabemos que será difícil lo que se viene. El objetivo para el cual nos enfocamos es mantener a Libertad en la Liga Nacional y haciendo lo mejor en esta Sudamericana.
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