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La NBA es una competencia que está en continuo movimiento, actualización, con cambios que busquen mejorar las condiciones del juego. El arbitraje, la forma de dirigir, la forma de cobrar es uno de los aspectos que suele modificarse y cambiarse en las distintas temporadas. Las intenciones de adaptarlo a los distintos cambios en el juego suelen ser un problema.

En la actual temporada se vio en reiteradas ocasiones a los jugadores quejarse porque creen que el arbitraje no está a la altura de las circunstancias o porque no miden con la misma vara. Simulaciones, contactos son algunos de los reclamos que los jugadores hacen habitualmente. Pero ahora la situación traspaso los márgenes de la cancha y pasó a los bancos de suplentes: los entrenadores comenzar a quejarse cada vez más pero, a diferencia de lo que ocurría habitualmente, ahora lo expresan y lo hacen público.

Hace unos días fue Darko Rajakovic quien explotó durante la conferencia de prensa por insinuar que favorecieron al triunfo de los Lakers. Ahora, recientemente, fue Mike Brown quien puso el grito en el cielo luego de ser expulsado y que su equipo perdiera ante Milwaukee Bucks.

Brown se sentó en la conferencia de prensa, pidió una notebook y pasó un vídeo con una falta que le sancionaron a favor de Damian Lillard y que generó su enojo a tal punto que terminó expulsado del encuentro. “No sé cuál es la norma en estas situaciones”, expresó Mike mientras mostraba la imagen. El conteo de tiros libres acabó siendo de 32 de los Bucks por 20 de los Kings. “Puede pasar, pero algunas faltas son frustrantes”, concluyó el entrenador.

Mike busted out the film to break down why he got ejected tonight 😂 pic.twitter.com/7sO8yJ3g9y

— Kings on NBCS (@NBCSKings) January 15, 2024