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Minnesota terminó una nueva temporada donde llegó a playoffs y tuvo una confirmación que lo ilusiona mucho de cara al futuro. Es que el crecimiento de Anthony Edwards fue la gran noticia de una campaña donde les costó tener su plantel completo muchísimo y el escoltadio un paso al frente.

“Anthony es un jugador que le encanta jugar, no se quiere perder ningún partido. Eso es lo que rescato de él. Puede estar con problemas físicos, pero siempre va a estar ahí y va a intentar jugar. Es un portento físico, tiene una capacidad para ir al aro brutal, está creciendo día a día en las lecturas de juego porque le empiezan a poner dos o tres defensores, incluso en aclarados y ni hablar cuando juega pick and roll” comenzó a definirlo en Básquet Plus Pablo Prigioni.

Y agregó: “Está mostrando un progreso y está rompiendo algunos récords de jóvenes que impresiona. Con su corta edad, que muestre el progreso que ha mostrado, ha tenido ya dos temporadas jugando playoffs y muy bien, con lo cual genera mucha ilusión en la organización”.

Sus números no paran de aumentar. Pasó de 21.3 puntos a 24.6, de 4.8 rebotes a 5.8 y de 3.8 asistencias a 4.4 en esta 2022/23, la tercera de su carrera profesional. Además, su porcentaje de tiros fue de un 45.9% y de triples subió a un respetable 36.9%.

Pero en los playoffs dio un paso más. Elevó sus promedios a 31.6 unidades, 5 recobres y 5.2 pases gol, con 48.2% de cancha y 34.9% de larga distancia. “Él quiere estar en los momentos importantes y tener la pelota. Eso no se ve mucho y por eso es que lo hace tan especial” resaltó el argentino, que es asistente de Minnesota.

Además, la llegada de Mike Conley en lugar de D’Angelo Russell le dio un mayor lugar y propició su crecimiento. “Eso también propició que el balón estuviera más en las manos de Edwards, con lo cual mejoró y creció de manera más rápida. Tuvo un impacto muy positivo ese cambio”.

El cordobés, además, se encarga de la ofensiva dentro del cuerpo técnico e intenta ayudar a Edwards en su visión de juego, pero también resaltó la contracción al trabajo: “Intento siempre remarcarle las opciones que tiene cada vez que juega una acción, ya sea un aclarado, un pick and roll. Un poco mi función es en el postpartido remarcar otras opciones o remarcar cuando lo ha hecho bien. Entonces es como una enseñanza continua de ponerle situaciones en video que pueda ver ‘fijate que tenías acá tres encima, te ayudan siempre por acá’, es lo que me toca hace en el prepartido también. Hay un montón de situaciones de juego que intento, cuando me toca el video de ataque, remarcarle para ayudarle a las lecturas de después. Es muy receptivo y él juega con una verticalidad y velocidad muy fuerte, y hay veces que todavía le cuesta ver algunos de esos pases, pero cada vez lo hace mejor y es un chico muy agradable para trabajar”.

Un diamante en bruto que se sigue puliendo en los Timberwolves y que, ya con Karl-Anthony Towns y Rudy Gobert más un plantel sano, tendrán una gran oportunidad de ser protagonistas en el futuro cercano.