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Siempre hay un argentino en donde se busque a lo largo del mundo. Esa frase la dicen constantemente. Y en este caso encontramos al único argentino que se encuentra dentro de la organización de FIBA con el 3x3, la disciplina donde la Federación Internacional está apostando mucho y no para de crecer.

Es que Maximiliano Palheiro hasta 2017 no estaba interiorizado en el 3x3, pero en poco menos de cinco años se metió en la escena y hoy es el único albiceleste dentro de la organización, aunque primero lo hizo en la Confederación Argentina. “Yo estaba jugando y era entrenador. Cuando hice el curso de entrenador de ENEBA, el director de la carrera era Facundo Petracci, que al mismo tiempo era coordinador en la CAB. Les gustó mi perfil, yo en ese momento trabajaba en empresas también porque estudié Comercio Exterior, entonces me llamaron para ver si quería sumarme para armar un proyecto del 3x3. Eso fue a principios de 2017 y yo de eso no conocía prácticamente nada. Ahí empecé a organizar los eventos con la CAB del 3x3 en el circuito nacional, eventos muy chicos, pero fuimos a un par de provincias, acompañando los eventos de cinco vs cinco generalmente”.

Pero para 2018 se iban a desarrollar los Juegos de la Juventud, el evento que catapultó a Maxi a la escena mundial: “Surgieron los Juegos de la Juventud y fui encargado de la disciplina. Ahí estuve completamente involucrado en el proyecto un año y medio, trabajando en conjunto con FIBA. Con el tiempo me alejé de CAB para concentrarme en los Juegos Olímpicos y ahí tuve la primera vez trabajando con FIBA. Ahí les gustó el trabajo, les gustó cómo salieron los Juegos y me llamaron para sumarme al equipo de ellos”.

Él mismo se encarga de describir su trabajo: “Estoy tanto en el World Tour como en los eventos de selecciones nacionales. Yo pertenezco al departamento de eventos del 3x3. Mi responsabilidad es, una vez que está firmado el contrato con alguna federación que quiera albergar el evento, empezamos a desarrollar todo lo que tienen que hacer ellos, siguiendo todas las especificaciones de FIBA. Generalmente se hace seis meses antes y ayudamos desde nuestro lugar para que los eventos se realicen de la mejor manera”.

Tiempo después estaba ya rodando en el mundo con el 3x3. “Mi primer evento fue en 2019, en el Mundial de Amsterdam, pero ahí no estaba contratado formalmente por temas de papeles. Pero trabajé en forma individual, después paré y en el proceso de los papeles, antes de la pandemia me fui para allá en Barcelona, donde está la oficina de FIBA”.

Organizar en pandemia, toda una odisea

Pero en 2020 el impulso se frenó por el Covid: “Con la pandemia se paró todo. Justo cuando saltó la pandemia estaba en India organizando un clasificatorio para Tokio. Cuando se empezó a hablar del covid, me volví a Barcelona. Todos esperando, pero cada vez que pasaba el tiempo los eventos se iban posponiendo, y así por meses, con poco trabajo de replanificación de los eventos, sobre todo porque cada país era un mundo con el manejo de la pandemia. Por ejemplo, estuvimos en Japón a principio de año con el primer World Tour y ahí todavía era obligatorio el uso de mascarilla y un montón de restricciones en término de movilidad. Eso fue hasta que se empezó a abrir. Primero fuimos a Hungría, que tenía muy bajo nivel de casos, en agosto del 2020, y el gobierno permitió hacer un evento internacional con burbuja, testeos constantes para todos, se hicieron por primera vez tres eventos de World Tour en la misma ciudad de manera consecutiva, para que los jugadores empiecen a competir, a ganar plata y empezar a rodar la maquinaria. Ese fue el primer evento de FIBA post pandemia”.

 Allí, poco a poco se fue reactivando pero, como cuenta Palheiro, fue todo muy complejo: “Fue muy difícil, cada país fue un mundo distinto. En Debrecen permitían aforo del 50%, con una tarjeta sanitaria que se las daba el gobierno húngaro que los habilitaba a ir a espacios públicos. Si bien siempre el 3x3 es más televisivo, con el streaming de Youtube, las canchas son más chicas, entonces, si bien se le da un excelente producto de la cancha, es un producto televisivo, de clips cortos de las jugadas. En ese sentido nuestra producción no cambió. Lo que si cambió era lo que teníamos que hacer, con los protocolos en el lugar. Otros países eran cero público, cero fan zone, cero actividades, en Arabia estaba con pantallas led y toda la gente mirando en vivo en sus casas el streaming y aparecían como si estuvieran en el público, era toda una cancha llena de paredes de leds con cientos de personas que iban cambiando a medida que se jugaban los partidos. Otros eventos había cartones de público, que la gente podía mandar su foto y se hacía el cartón con su foto para estar ‘presentes’. Cada país innovó a partir de las ideas que les dábamos”.

.¿Qué fue lo más raro que te pasó en todo este tiempo?

-Tuve la suerte de conocer muchos países y conocer otras culturas, cómo trabajan con la gente. Por ejemplo, en Japón tuvimos innumerables llamados, videos, preguntan todo, quieren investigar, se meten, estás constantemente respondiendo inquietudes, te piden material. Hay comités locales que les mandás el manual y con eso está para ellos. Pero ellos te pedían más información, lo cual es mucho trabajo, pero después cuando llegás al evento sabés que todo está perfecto.

Después me tocó ir a países que para nuestra cultura son más raros. Tuve la suerte de ir a Emiratos Árabes, Dubai, Abu Dhabi, que ves gente con turbantes, cuando llega el jeque árabe a la cancha se para todo, todos están atentos a eso y nada más. Lo más loco que me pasó fue en Qatar, en Doha, en el primer evento que voy allá en marzo, ellos tienen ciertos tiempos para rezar preestablecidos, los que son más devotos tienen que rezar al menos en tres de ellos. Y el 3x3 tiene DJ en vivo, un presentador hablando todo el tiempo. Se acordó con el comité local que durante el tiempo de rezo se hacía silencio pero se seguía jugando el partido. De pronto estábamos jugando uno de los partidos y se levantaron todos los oficiales de mesa a rezar y tuvimos que esperar a que terminaran para seguir con el evento.

.¿Y los lugares más llamativos donde organizaron eventos?

-Hicimos dos en Filipinas este año, los dos dentro del shopping. Nunca me imaginé que se iba a jugar al básquet dentro de un shopping. Y ahí no es la pasión que tenemos en el sentido de locura, pero estaba lleno hasta cuando había gente entrenando o entrando en calor. Todas las galerías explotadas de gente. También hicimos uno dentro del palacio de Congreso en Rumania, con todos los candelabros y bien antiguo, un palacio de Europa del Este. La Copa de Europa fue en París y se jugó debajo de la Torre Eiffel. Este año la Eurocopa en Gratz era arriba de una montaña, que teníamos que acceder con un funicular, y la cancha estaba arriba de una colina dentro de lo que era una estructura cerrada, toda de ladrillo, con huecos en las paredes, como un anfiteatro con palcos, y se armó una cancha ahí adentro que era como estar encerrado en un castillo. La mesa de control la tuvimos que hacer dentro de un hueco de la pared, y la cancha tenía un techo automático que lo ibas abriendo y cerrando según las condiciones climáticas. También jugamos en un puerto, con los barcos pasando en Atenas, en una playa en Israel.

El futuro para el 3x3 a nivel mundial

Con toda esta experiencia de tres años a cuestas, Maxi es una persona más que autorizada para hablar del crecimiento de la disciplina. “Cada vez más las Federaciones están entendiendo que tienen que apostar al 3x3. Por ejemplo, Austria, que en el básquet convencional no se destaca, no tiene ningún logro a nivel europeo o mundial, encontraron una veta en el 3x3 para competir al máximo nivel. Hoy por hoy el equipo de Austria, que se llama Gratz, está participando en el World Tour, tuvo su primera experiencia ganando. Obviamente invirtieron en eso, presupuesto, entrenadores, eventos en Austria como la Copa de Europa. Eso les da rodaje a los jugadores porque al ser los locales de un evento de selecciones ya tu equipo está clasificado, entonces le da rodaje a sus jugadores, equipos y selecciones. Mismo caso de Mongolia para competir al máximo nivel, y ellos estuvieron en los Juegos Olímpicos de Tokio con las chicas y fue el primer deporte grupal que ellos tuvieron en un Juego Olímpico. Entendieron el proceso, el sistema, obviamente invirtieron y lograron llegar a un nivel que en el cinco por cinco no hubieran logrado, porque no tienen los jugadores para hacerlo”.

A su vez, agregó que “seguimos un proceso que empezó oficialmente en 2012, con pocos eventos en el año. Año a año fue creciendo, con la pandemia se paró y ahora estamos en niveles más altos que en prepandemia, en cantidad de eventos, en federaciones involucradas, en cantidad de público, en redes sociales, los Juegos de Tokio nos dieron un crecimiento impresionante. Los chicos de medios que la final del 3x3 masculina fue el evento más visto de los Juegos Olímpicos en ciertos países, algo impensado tiempo atrás”.

A futuro, con todo esto realizado, el techo aún no se vislumbra: “El objetivo es seguir creciendo en cantidad de eventos. El departamento en FIBA está creciendo para cumplir con todo eso, para darles más posibilidades a los jugadores de que compitan. No es lo mismo tener un jugador que ya es profesional y se dedica al 3x3, que antes no pasaba porque no había tantos eventos. Queremos que siempre haya eventos donde puedan competir, eso está pasando. Obviamente hace un año que estamos trabajando en Paris 2024, que es el evento más grande a corto plazo que tenemos. Tokio fue nuestro primer Juego Olímpico, pero fue sin público para la mala suerte nuestra. No se pudo disfrutar tanto la gente como nosotros al máximo”.

El 3x3 en Argentina y Latinoamérica

“Latinoamérica está bastante atrasado a comparación con Europa, que está un paso adelante del resto, y Asia. Realmente por un tema de geografía, porque ir a jugar todos los torneos, la mayoría están en Europa o Asia, y llevar un equipo es muy difícil, es un costo muy grande, entonces eso influye. No está tan desarrollada la disciplina, lo cual es entendible porque es difícil lograrlo, y por eso hoy no hay ningún equipo latinoamericano compitiendo en un Mundial. Brasil está un poco mejor porque tuvo un equipo pro circuit y competía más, y hace muchos eventos en su país y se compite mucho el 3x3, pero le falta el salto internacional para competir con los mejores, lo que hace que el ranking de federación aumente y permita clasificar a los grandes eventos. Puerto Rico compite con un equipo en el World Tour, tiene buen nivel de jugadores, también meten sus jugadores de cinco por cinco, entonces su nivel de juego es mayor. Chile está apostando ahora bastante”.

En cuanto a Argentina, Maxi dio su visión: “Argentina está un paso más atrás. Si bien tenés los jugadores y la estructura, somos un país fuerte, no está apostando o no explotó como podría explotar”.

En esta línea, como ha pasado con muchos logros, el país no aprovechó la exposición del 3x3 en los Juegos de la Juventud para crecer. “A nivel base si podría haber explotado con los Juegos de la Juventud, en cantidad de jugadores, desarrollar la disciplina, un departamento propio que lo fomente. Se que ahora lo están haciendo, con un tour de 3x3 por el país. En CAB cuando terminaron los Juegos llovieron los mails para preguntar por el 3x3 cuando antes nunca sucedía. Lo mismo pasó con Beach Handball, que mucha gente ni conocía que existía”.

Así, explicó que “no aprovechamos esa exposición para fomentar que chicos, clubes, escuelas, donde quieran armar un proyecto, se juegue obligatoriamente, que las escuelas tengan 3x3, que aprendan el formato que es divertido para un chico que no juega al básquet y lo hace escolarmente porque toca mucho más la pelota, tiene más posibilidades de tirar, de jugar con sus compañeros. Eso no se aprovechó y una vez que la burbuja bajó todo se hace mucho más difícil”.

Buenos Aires 2018, un evento histórico para el 3x3

La locura que significó aquella cancha en Puerto Madero durante los Juegos de la Juventud llamó la atención a nivel mundial. Allí se vio una vez más la locura de los argentinos por el deporte en general, y el 3x3 quedó en boca de todos por el marco que le aportó el público.

“Siempre hablo con los directivos o los árbitros de ese torneo y todos coinciden en que nunca vieron una locura de ese nivel con el público. Es más, el árbitro que da las capacitaciones, en su presentación la última imagen que tiene es una foto de Buenos Aires 2018 con la cancha explotada durante un partido de Argentina y el mensaje que dice ‘este es nuestro objetivo’, como que tiene que explotar de esa forma, de gente y emoción. He ido a canchas con mucha gente, pero la locura de Buenos Aires hasta a mi me sorprendió, no lo esperaba”.

Por último, Palheiro contó las sensaciones que le genera su trabajo: “Si me preguntabas antes de los Juegos de la Juventud ni me lo imaginaba, porque en 2017 empecé en el 3x3. Es un orgullo enorme poder haberlo logrado, que confíen en mí que no es fácil. FIBA tuvo que hacer un montón de procesos porque yo no tengo pasaporte, a lo cual estoy muy agradecido. También es una responsabilidad rendir porque confiaron en mí”.

Y dejó un deseo a futuro para la región: “Me gustaría que haya más gente, no solo de Argentina sino de Sudamérica involucrada, porque eso también quiere decir que el 3x3 está creciendo en esa región. Como argentino me gustaría que se desarrolle mucho más en el país y abra puertas”.

Alejandro Malky / [email protected]
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