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Bubba Wells tuvo un gran paso por el equipo de básquet universitario de los Governors de la Universidad de Austin Peay. Durante los 4 años que jugó en la Universidad ubicada en Tennessee, tuvo varias lesiones de diferentes grados de gravedad de las cuales de las cuales consiguió recuperarse y logró a a ser el máximo anotador de la División I de la NCAA no oficial, debido a que no llegó a ser incluido en la clasificación por no jugar el número mínimo de partidos.

Llegó a la NBA en 1997 con el mote de jugar anotador aunque poco confiable por su historial de lesiones. Fue elegido en sexta posición de la segunda ronda por Dallas Mavericks. Wells tenía grandes capacidades y se esperaba qye tuviera una respetable carrera en la NBA, aunque nadie imaginó que pasaría a la historia por ser el jugador que más rápido tuvo que dejar la cancha.

El 29 de diciembre de 1997, los Mavericks enfrentaban a los míticos Chicago Bulls de Michael Jordan. Dallas llevaba una racha de 12 derrotas consecutivas y llegaban con un balance de 5-24. Por su parte, los Bulls llevaban una racha de 8 partidos ganados y un balance de 20-9.

El partido fue muy igualado y se decidió en los últimos minutos. El entrenador de Dallas era Don Nelson, quien decidió adoptar la táctica de intentar que Rodman (el peor tirador de libres de aquellos Bulls) fuera a la línea de tiros libres para provocar sus fallos en el lanzamiento. Para esto sacó a la pista expresamente a Bubba Wells que procedió en un auténtico Hack a Rodman.

La estrategia no sólo no funcionó, ya que Rodman anotó 9 de los 12 lanzamientos de tiros libres y finalmente los Bulls se llevaron el partido por 111 a 105, sino que Bubba Wells fue expulsado a los 2:43 de haber ingreso salió por generar 6 faltas personales. Récord absoluto en la NBA del jugador que sólo participó en 39 partidos en la liga.