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El camino de Austin Rivers en la NBA siempre estuvo marcado por altas expectativas, desde su estatus como prospecto estrella en el instituto, pasando por su paso por Duke bajo las órdenes de Mike Krzyzewski, hasta su elección como 10º en el Draft de 2012. Sin embargo, su carrera en la liga no ha sido del todo brillante, y un hecho el medio HoopsHype con un artículo lo distingue de manera particular: Rivers comparte el récord de más temporadas disputadas sin recibir ni un solo voto al All-Star por parte de sus colegas, una curiosa distinción que alcanzó en su última campaña activa, la 2022-23 con los Minnesota Timberwolves. Este récord, que ostenta junto a Landry Shamet, parece evidenciar algo más profundo sobre su percepción entre los jugadores de la liga.

El sistema de votación All-Star, que desde 2016-17 incluye a jugadores y medios junto con los fans, suele generar casos anecdóticos. Mientras figuras de renombre aseguran su lugar año tras año, otros jugadores menos reconocidos reciben votos simbólicos de compañeros como muestra de apoyo o humor. Incluso nombres inesperados, como Jordan Walsh o Yuki Kawamura, han logrado captar la atención de algún colega. Pero Rivers, a pesar de haber tenido temporadas respetables como la 2017-18, donde promedió 15.1 puntos y 4.0 asistencias por partido, jamás recibió un solo voto, ni siquiera en tono de broma.

A sus 31 años y tras más de una década en la liga, Rivers no tiene contrato en la actualidad. Aun así, su carrera no puede reducirse únicamente a este curioso récord. Aunque jamás fue una estrella, su rol como jugador de rotación confiable le permitió sobrevivir en la liga más competitiva del mundo durante 7 temporadas.