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En los últimos días, muchas veces se ha leido la frase "Si no lo van a usar, que a Campazzo lo traspasen". Es una expresión de deseo de todos los argentinos, pero mucho más difícil de implementar de lo que la mayoría se imagina. 

Primero vayamos a una regla simple. Para vender a alguien a otro equipo, o traspasarlo, es necesaria otra parte que esté interesada en su activo. Facu, hoy, no es un activo valioso para Denver, con lo cual no hay muchos interesados en sumarse ahora a contratarlo cuando, llegado el caso, lo pueden negociar en el receso sin presiones ni fechas apremiantes. 

Segundo punto. A esta altura del año, es obvio que Facu no le cambiaría la vida a ningún equipo interesado en él. Podría encajar mejor o peor en alguno, pero la estructura de los planteles está dada de tal manera que, salvo canjes importantes como los posibles de Harden, Simmons y algún otro, se hacen más pensando en el año que viene o más lejos aún que en esta campañan.

Tercero. Campazzo no es un activo a canjear mano a mano. Necesita entrar en una operación en la que participen más jugadores de Denver, porque, por lo mismo que venimos diciendo, no va a subirle el rango a otro equipo, y su salario (3.2 millones), no es algo que sirva particularmente para liberar espacio en el tope. Entonces, debería entrar en un pack con los otros jugadores "canjeables" de Denver: JaMychal Green, Austin Rivers y Vlatko Cancar. Pero tampoco es sencillo.

Dos de ellos, Green y Rivers, tienen opción de veto a un trade, con lo cual seguramente solo elegirían buenas opciones personales, algo más difícil de conseguir todavía. Y, de ese grupo, solo Green puede ser útil para alguien hoy (también acaba contrato a fin de temporada), ya que Cancar está lesionado. En ese caso, uniendo a Green con Facu, por ejemplo, hablaríamos de un trade con 11.5 millones de dólares en salarios en juego, algo un poco más atractivo para alguien que quiera liberar espacio.

¿Qué más tiene para ofrecer Denver? Nada. No tiene picks de primera ronda hasta el 2027, tiene alguno de segunda, no demasiado requerido (salvo seguramente por OKC, el coleccionista), y nada más, porque el resto de la plantilla no está en ofera. Nadie, ni Nnaji, ni Howard, y menos Barton o Morris. En ese esquema, repetimos, no aparecen muchas opciones para que Facu se vaya de Denver. Casi ninguna. 

Ahora, ¿puede que hoy, en el revoleo de negociaciones, quede algún hueco disponible en algún equipo que calce justo para que vaya Campazzo? Y sí, puede pasar. Pero no sería lo más probable. Si no se concreta nada de todo esto, la peor opción de Facu será seguir hasta fin de temporada en este nuevo escenario de casi nula participación (alguna lesión o situación puntual podría sacarlo de ese sitio, pero no suena cercano) y enfocarse luego en el mercado de agentes libres por una nueva oportunidad en la NBA. Los otros 29 equipos ya saben lo que puede dar, y lo que no.