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Luego de su extensa gira como visitante, San Antonio por fin volvió a casa y su actuación no pudo ser mejor, jugando uno de sus mejores partidos de esta complicada temporada y venciendo a los Sacramento Kings por un contundente 112 a 85.

Igualmente, el comienzo no fue el ideal. Los de Popovich entraron algo desconcentrados defensivamente, dándole espacios a DeMarcus Cousins adentro, además de un interesante ingeso de Derrick Williams desde el banco. Kawhi Leonard arrancó encendido (11 puntos), pero de todas maneras, los de George Karl se llevaron el primer parcial por 27 a 26.

Luego de ese arranque con dudas, todo cambió para los Spurs. La defensa subió varios escalones y secó al rival, dejándolo en apenas un 21% de cancha, mientras que en ataque, Leonard siguió brillando y se le sumó un buen momento de Danny Green, para tomar control total de las acciones y meterse al entretiempo adelante 54 a 38.

Cualquier intento de reacción de los visitantes quedó rápidamente contenida por San Antonio en el tercer cuarto. Tony Parker tuvo algunos de sus mejores minutos de la campaña, luciendo como el Tony de siempre, Ginóbili sumó dos conversiones desde el banco y la diferencia se extendió a 24 (85-61).

El último cuarto ya estuvo de más para un partido que ya se había definido hace rato. Ambos entrenadores le dieron lugar a sus bancos de suplentes y los texanos siguieron extendiendo la ventaja, hasta llegar al 112 a 85 final, para sumar su tercer triunfo de forma consecutiva.

Kawhi Leonard fue el máximo anotador de San Antonio con 21 puntos y un excelente 9 de 11 de cancha, mientras que Tony Parker sumó 19. Por el lado de los Kings, el máximo anotador fue DeMarcus Cousins con 14 tantos, dentro de un panorama global muy pobre del equipo.

Manu GinóbilI: 13 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 3 faltas, 2 robos, 6 pérdidas, 1 tapa, 3-6 en dobles, 2-3 en triples y 1-1 en libres durante 21 minutos.