Basquetplus.com

Atlanta Hawks (3) 82 - Washington Wizards (2) 81

Como varias otras de estos playoffs 2015, la serie entre Hawks y Wizards se está definiendo por detalles y jugadas de último segundo. El quinto partido no fue la excepción, con un final para el infarto que esta vez favoreció a los dirigidos por Mike Budenholzer.

El partido fue parejo durante la mayor parte de su transcurso y de esa misma forma llegó a su definición. Con unos 10 segundos en el reloj y los locales adelante por 80 a 78, Paul Pierce parecía volver a transformarse en el héroe de la jornada, clavando un tremendo triple desde una esquina para adelantar a los suyos por la mínima. Sin embargo, esta vez Atlanta tendría la última palabra.

Dennis Schroder encaró el aro pero el alemán fue bloqueado por John Wall, quien hizo su regreso a las canchas a pesar de sus múltiples fracturas en la mano izquierda, pero el brasilero Nené no hizo un cerco reboteador correcto y a pura potencia, Al Horford le sacó la bola. El dominicano no perdió tiempo y con su corrección, puso a los Hawks al frente por 82 a 81, con 2 segundos en el reloj. Los Wizards ya no tuvieron respuestas y el triunfo quedó en manos de los locales, quienes se adelantaron por 3 a 2 en la serie.

Atlanta había mostrado una cara muy mejorada en el cuarto encuentro, pero aunque se llevó la victoria, volvió a estar lejos de su mejor nivel en la noche del miércoles: apenas lanzó un 40% de cancha y un 22% en triples, además de perder más balones (23) de los que sumó como asistencias (21). Por más que le pueda sirvar para llevarse esta serie, si los de Budenholzer quieren aspirar a cosas más grandes, deben modificar varias cuestiones en su juego.

Horford no sólo fue la figura del partido gracias a su disparo en el cierre, sino que además cargó con su equipo totalizando 23 puntos y 11 rebotes, siendo el único de los iniciales Hawks en lanzar por encima del 50% de cancha (10-18). En Washington, el mejor fue Bradley Beal con 23 puntos y 7 rebotes, mientras que en su vuelta, John Wall sumó 15 puntos y 7 asistencias.

Golden State Warriors (3) 98 - Memphis Grizzlies (2) 78

Con otro gran partido de Stephen Curry, los Golden State Warriors vencieron a los Memphis Grizzlies por 98 a 78 y tomaron ventaja de 3 a 2 en su serie por las semifinales de la Conferencia Oeste. Los fantasmas de los partidos 2 y 3 de a poco parecen ir quedando atrás para los comandados por Steve Kerr.

Los Grizzlies comenzaron mejor el encuentro y hasta llegaron a tener ventaja temprana de doble dígito, con un arranque explosivo de Zach Randolph y una altísima eficacia ofensiva. Sin embargo, no pudieron mantener esa diferencia y entre Harrison Barnes y los triples de un incontenible Stephen Curry, no sólo que Golden State se acercó, sino que además terminó al frente el primer parcial por 26 a 25.

Aunque a partir de ahí los Warriors no tuvieron su noche más brillante en ataque, esta vez ganaron con su defensa, la cual volvió a secar a un Memphis con pocas ideas y mucha menos precisión. En la previa, el DT de los Grizzlies Dave Joerger dijo que eventualmente su equipo iba a tener que anotar 100 puntos en esta serie para tener chances. Desde temprano quedó claro que esta no iba a ser la noche y los locales extendieron su ventaja, para dejar el último cuarto prácticamente sin sentido (+17 entrando al mismo).

Los números de Curry pueden no ser los mejores del MVP de la temporada regular, pero en el contexto del juego, fueron determinantes: acabó con 18 puntos, 7 rebotes, 6 robos y 5 asistencias, convirtiendo 6 de 13 en tiros de tres puntos. Lo más importante: hizo todo eso cuando todavía el partido estaba para cualquiera, además de ser el motor de la reacción en aquel clave primer período. Además, Klay Thompson anotó 21 puntos y Andre Iguodala trajo 16 desde el banco.

Para la visita, que no contó con Tony Allen, Marc Gasol fue de lo poco rescatable de un conjunto que terminó lanzando un bajo 39% de cancha. El español aportó 18 puntos y 12 rebotes en 37 minutos de juego, siendo el único miembro del plantel en superar las 13 unidades.