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Los Houston Rockets fueron protagonistas de la NBA cuando Michael Jordan se retiró del deporte para jugar béisbol. El núcleo de los Rockets es icónico, habiendo ganado dos anillos seguidos, pero todo podría haber ido muy mal. Una pelea entre Vernon Maxwell y Hakeem Olajuwon se puso tan fea que la policía tuvo que intervenir en el vestuario. En aquel entonces, no tenían ni uno de sus títtulos en las vitrinas.

Vernon Maxwell fue quien contó la historia. El ex Rockets dijo: "Jugamos contra Seattle y en la primera mitad tuve una confrontación con alguien del equipo de Seattle. Se quedó ahí en la cancha, pero estaba muy molesto. Cuando me enojé, y no sé por qué hago esto, solo voy a escupir en el suelo", recordaba el icónico jugador de la franquicia.

Hakeem, por su parte, le recriminó ese gesto. "Tené algo de clase, no escupas en el suelo". Admitió Maxwell, que luego contestó. "¿Quién es este tipo que me dice que debería tener clase? Él no está dirigiendo mi vida". Entonces, Vernon escupió de nuevo. "Hakeem me increpó ahí mismo. '¿Qué dijiste?'. Acto seguido, me golpeó tan fuerte que me tiró hacia atrás en mi silla. Me levanté, se la tiré encima, rompí un vidrio por todas partes. La policía entró con sus armas en la mano. Recogí un pedazo grande de vidrio y yo iba a perseguir a Hakeem y apuñalarlo", recitó Maxwell.

Para la buena fortuna de Olajuwon, que igual seguro podía defenderse a sí mismo, la policía redujo a Maxwell y calmó los aires en ese vestuario, donde todos los demás jugadores habían huido despavoridos. "Creo que él no se dio ni cuenta de la situación, así que al día siguiente los ánimos ya estaban más distendidos y yo no volví a llevarle la contra", sentenció el jugador.