Entrevistas

Exequiel Cassinelli, construyendo una vida después del básquet

14:16 12/12/2021 | El exjugador de Gimnasia y San Lorenzo entre otros, cambió la naranja por los planos y se gana la vida haciendo domos geodésicos.

Exequiel Cassinelli en su nueva faceta como constructor

La pandemia hizo de muchas personas la reinvención y para aquellos jugadores que estaban entre la delgada línea de hacer un deporte profesional que alcanza para vivir y no mucho más, el cierre de la actividad encendió las alarmas. Había que salir a buscar un sustento, otra vía de escape desde lo económico para sostenerse. Si bien se sabía que algún día el básquet iba a volver, la realidad del país y de los clubes, hizo que muchos se replantearan volver a jugar al cien por ciento, sobre todo aquellos que no juegan Liga Nacional y se limitan a peregrinar por las categorías de ascenso.

Exequiel Cassinelli fue uno de esos que dio el salto y optó por darle una vuelta de tuerca a la vida y desde Esquel, su zona de residencia, empezó un proyecto con mucho empuje, en principio autodidacta, pero que va creciendo cada vez más y es la construcción de domos geodésicos.

"Puse con un socio una constructora, veía una buena posibilidad en la construcción de domos geodésicos, algo muy de moda. Me hice unos cursos por internet en Chile y en México sobre la construcción de domos y me conseguí un socio que es del rubro de toda la vida, de acá en Esquel y nos pusimos con eso. Arrancamos con domos, kit auto instalables, demás y después como estamos ahí, nos metimos con todo tipo de construcciones ya sea en seco o tradicional”, comentó a manera de presentación el escolta en una charla con Básquet Plus.

Los amigos del básquet, también son para toda la vida y eso es lo lindo del deporte, por eso que Pablo Orlietti, exjugador de Gimnasia y amigo de Exequiel fue quien lo indujo a esto de los domos.

“Cuando empezó la pandemia comencé a hacer cosas con maderas, como hobby al principio. Soy amigo de Pablo Orlietti que también está en la carpintería y me comentó esto de los domos y había empezado a hacer alguno de hobbi en su casa. Me puse a investigar y me parecía una buena alternativa para la zona, hice todos los cursos y aprendía a hacer los domos y los revestimientos, pero no tenía idea de la construcción, por eso necesitaba un socio que la tenga clara para que se complemente con lo mío. Después me busqué un maestro mayor de obra e ingeniero para hacer los planos y poderlos presentarlos en la municipalidad y tener el consentimiento para poder construir ese tipo de casas”.

Meterse en un nuevo proyecto a ver qué pasa, no era para nada la intención de Cassinelli y casi como en una lección de vida, si lo vas a hacer, hacelo bien.

“Apenas me di cuenta que se abría esta puerta fui a full, dado que sabía que esta era una oportunidad y para que funcione bien, había que meterle con todo y que sea un salto directo, a media agua no iba a tener el mismo resultado. Le metí con todo y más analizando todo el ámbito del básquet este año que estaba bastante decaído, me di cuenta que no era más por ahí y tenía que buscar por otro lado”, destacó.

Dejar la pelota naranja, su compañera de tantos años con alegrías y tristezas podía significar una traba desde el desapego a una actividad que lo acompañó siempre. No obstante, despojado de todo expresó: “Cero arrepentimiento por ahora, estoy muy cómodo me gusta mucho el trabajo que estoy haciendo. Básquet miro muy poco, solamente sigo a amigos o conocidos que jugaban conmigo antes. Seguirlo como van nada más, mirar los juegos muy poco, no me atrae por ahora. Quizás más adelante lo extrañe un poco más, pero por ahora estoy bien así”.

El deporte de alto rendimiento, para aquellos que lo practicaron, puede canalizar una ayuda si logran decodificar las emociones que sintieron en algún final cerrado, en un juego definitorio o en situación apremiante peleando el descenso. Todo deja algo y para el nacido en Capitán Bermúdez, el básquet le sirvió para mantener la calma ante la incertidumbre de algo nuevo.

“Me ayudó mucho el básquet en todo este proceso, en la mentalidad para afrontar momentos de presión en el negocio o cosas así. Momentos difíciles que quizás lo tomas con una carga distinta porque estas acostumbrado, pero después hay otra parte que por ahí estamos metido en el ámbito del básquet y no nos damos cuenta que en el ámbito laboral normal hay cuestiones que nos faltan y que cualquier persona está más adelantada que vos en pequeñas cosas, que por haber estado metido en el básquet durante tanto tiempo no las sabías", aseguró.

Doce de años de carrera fueron para Cassinelli, desde Gimnasia de Comodoro, donde se dio el lujo de jugar en la élite, pasando por San Lorenzo, Platense, Ramos Basket, entre otros, hasta llegar a Zárate Basket donde vivió un final muy bueno siendo parte del mejor quinteto del Torneo Federal en el 2019.

"Disfruté muchísimo el haber podido tener la posibilidad de haber competido de manera profesional, la verdad que es algo increíble y que no me imaginaba cuando era chico y recién empezaba. En ese sentido estoy muy agradecido con el básquet".

Otra vida le espera a Exequiel Cassinelli, con apenas 28 años, colgó las zapatillas por los planos y es feliz, nada más que eso importa para saber qué es lo que se quiere. No obstante dejó picando que en un futuro, aunque sea en una liga patagónica, pueda volver a compartir la felicidad con la pelota naranja de su lado.

"Quien te dice que cuando el negocio camine con fluidez, vuelva a jugar al básquet por acá en Chubut, no lo descartó para nada, pero por ahora estoy muy bien así", concluyó

Mauro Osores / [email protected]
En Twitter: @basquetplus

En Twitter: @osoresmauro

 

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