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El campus ProCamp llegó a su fin de la mano de Facundo Campazzo y Nico Laprovíttola. Miles de enzeñanzas se llevaron los chicos que participaron de las practicas realizadas en el CeNARD. A partir de ello, Facu Campazzo reflexionó sobre las sensaciones que le generó el ProCamp durante este fin de semana. 

- ¿Cómo se sienten los días acá con los chicos?

. Contentos, contentos porque repitan algunos chicos, contentos también que se renueven también. Nosotros la pasamos bárbaro acá con ellos, con que se diviertan, con que hagan amistades, con que sumen experiencias, con que se lleven una sola cosa, una sola cosa nomás de básquet o de la vida o lo que sea, para nosotros es ganar. Así que nada, cada vez que terminamos la temporada, siempre tenemos muchas ganas de estar junto con Nico para organizar todo esto y poder ver a los chicos. Nos divertimos mucho porque ellos se divierten también y eso creo que eso nos lleva de vuelta.

- ¿Cómo viste al equipo que se volvió a conformar? ¿Cómo se sintieron ustedes? Y bueno, ¿qué desafío creés que van a enfrentar en los próximos torneos internacionales?

. Nada, lo noté y lo sentí muy bien. La verdad, las sensaciones son muy buenas. Fue bueno juntarse sin tener ningún torneo mundial o olímpico. No nos preparamos para ningún torneo, pero la preparación fue como si fuese para un torneo. El compromiso se valora muchísimo. Tuvimos casi todos los jugadores ahí entrenando. Los jóvenes también, así que tuvimos amistosos también muy importantes. Con buenos y malos resultados, pero con las sensaciones en general muy buenas. Les repito, habernos juntado en unas vacaciones donde no teníamos ningún torneo oficial, creo que eso le da mucho más mérito y valor al juntarse y al crear un hábito de entrenar. Comandado por Pablo Prigioni, creo que él para nosotros es una persona muy importante y que tenemos que aprovecharla.

- Facundo, teniendo en cuenta esta nueva edición del Campus, si bien ustedes le dan enseñanza a los chicos con estas herramientas para su juego, ¿qué enseñanzas les dejan los chicos a ustedes?

. La verdad que los chicos tienen muchas cosas de esa inocencia, de divertirse. No se preocupan por absolutamente nada, solamente quieren jugar y divertirse. Creo que eso devuelve un poco la esencia de por qué empezamos nosotros a jugar. Creo que eso nos contagia a nosotros. Se divierten, la pasan bien, se hacen muchas amistades y ver eso es como para nosotros un shock de energía para lo que viene en la temporada. Eso nos hace volver un poco a las raíces nuestras y de por qué empezamos a jugar a este juego.

 - ¿Cómo la notás ahora la selección? ¿Qué sentís que le falta? ¿Podrás hacer algún análisis breve sobre ello?

. La noté muy bien. La verdad nos fuimos todos súper contentos después del proceso. Hacía falta juntarse y vernos las caras y entrenar juntos, entrenar duro y jugar amistosos. Pero bueno, crear el hábito de juntarse, aunque no se juegue en ningún torneo oficial, creo que suma para todos, para la selección, para los jugadores. Y el compromiso, como decía, el compromiso creo que es súper meritorio y valorable para cada uno de los jugadores. También encontramos una conexión con los más jóvenes que ayuda mucho también a la selección y que la selección necesita esa conexión de juventud con experiencia. Era un poco la sensación de que buscábamos, como pasó en China también previo al Mundial. Así que creo que vamos por un buen camino. Va a ser un camino largo, pero hay una idea de trabajo, una idea de juego, que era lo que necesitábamos, y si es comandado por Pablo, creo que van a pasar cosas buenas. Vamos a ir por el camino.

- ¿Tenés ganas de seguir con esta profesión de coach?

. Bueno, no sé. Cada año que pasa me encuentro más en la situación de que me gusta más este tipo de cosas. Estar con los chicos y seguir siendo parte de un equipo, a pesar del día de mañana retirarme. Me gusta la sensación de ser parte de un equipo y eso un poco va de la mano con los asistentes, entrenadores y demás. Pero bueno, hay años por encima, por delante, mucha preparación. Pero bueno, me gusta mucho el mundo de estar ahí, de estar con un entrenador, de estar con un asistente, de aprender desde ese punto de vista.

- ¿Cómo te ayudaba a vos el hecho de participar en estos campus cuando eras chico?

. Bueno, no tuve la oportunidad de participar en muchos campus cuando era chico, me hubiese encantado. Pero nada, creo que tenemos la suerte ahora de que haya jugadores e intentamos ser lo más cercanos posible. A mí me hubiese gustado ir a un campus de cualquier entrenador o de cualquier jugador y tener esa cercanía con el protagonista, digamos en este sentido. Y que sea cercano y que si tenía alguna duda, pregúntarle y que me la responda de la mejor manera. Y creo que eso es lo que buscamos tener en el campus, ¿no? Que nos saquen un poco de la palabra ídolo, de un listón tan alto, de bajarlo, de que no exista, de que realmente nosotros nos pusimos en sus zapatillas, jugamos con las mismas pelotas, en las mismas canchas, pasamos cuando éramos chicos por las mismas canchas. Y creo que ser lo más cercanos posible para mí es la única manera de llegar a conectar con los chicos. Y creo que en ese sentido lo estamos haciendo muy bien y es lo que me hubiese gustado a mí conocer. 

- ¿Qué te involucra en tu rol de líder de seleccionado a los jugadores jóvenes que están llegando a la selección?

. Lo que se viene trabajando no solamente yo, sino tanto los mayores, el cuerpo técnico, una manera de trabajar y una manera de afrontar un proceso de selección previo a un torneo, de buenos hábitos, de trabajar, de romperse el lomo entrenando. El compromiso de estar siempre a disposición de la selección. Al final esos creo que son valores que lo vienen metiendo desde la generación de ahora.

Francisco Basiglio Godoy/[email protected]
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