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Kobe Bryant tenía una gran memoria y lo confirmaba constantemente. En este caso, su paso por la selección de Estados Unidos comenzó en 2007 en el Preolímpico de Las Vegas, donde su equipo triunfó en la final ante Argentina, pero el escolta no se olvidó de un jugador en particular de su rival.

Es que Paolo Quinteros fue una pesadilla para Kobe en ese certamen, tal como contó Sergio Hernández en el podcast Basquet IQ: “Paolo le metió cinco o seis tiros en la cara a Kobe y no se olvidó para nada de esa actuación”.

Al año siguiente, en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, Manu Ginóbili se lesionó en las semifinales frente a Estados Unidos y su reemplazante fue el propio Quinteros. Y Bryant, atento a todo, lo agarró al defensor del escolta argentino, Michael Redd, y le dio una clase de conocimiento rival: “Redd le hizo una seña al entrenador como que tenía que defender a 'este', y Kobe se le acercó y le dijo, 'mirá que este te la va a meter en la cara. No creas que porque salió Ginóbili este no es nada'”.

Kobe, su amor por el básquet y su dedicación, una vez más demostrada en pequeños grandes detalles.