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Como mencionamos anteriormente, las franquicias que logran ser campeonas de la NBA llevan un proceso de construcción importante. En algunas lleva menos tiempo y en otras lleva más. Algunas fichan a la estrella del momento y automáticamente se ponen en cartel de candidatos, mientras que otras, como arquitectos o ajedrecistas, estudian y analizan cada movimiento para ir, de a poco, construyendo ese equipo que los lleve a la gloria.

El camino de Oklahoma City fue, claramente, el segundo. Los dos últimos movimientos de jugadores que hicieron fueron los que los catapultaron y los pusieron en este lugar de privilegio que están desde este domingo por la noche. Y no precisamente por sumar a dos grandes estrellas, sino por sumar a obreros que trabajan para el bien común sin importarles sus números, su protagonismo ni cuantos flashes se lleven en cada encuentro.

El primero y quizás más arriesgado y sorpresivo fue la salida de Josh Giddey para enviarlo a Chicago Bulls para recibir a Alex Caruso. En las horas previas al draft, el Thunder hacía un movimiento raro al desprenderse de un joven prometedor como el australiano, aunque había estado envuelto en algunos problemas extradeportivos. Pero sumó a un veterano de mil batallas que ya sabía lo que era ser campeón.

Pero eso no fue todo. Semanas después, Sam Presti hizo otro movimiento extraordinario desde las oficinas y consiguió fichar a Isaiah Hartenstein en la agencia libre. El interno, un lugar en el cual nunca pudo encontrar soluciones Oklahoma City, venía de tener una buena temporada en los Knicks para reemplazar al lesionado Mitchell Robinson.

Con estos dos obreros, el Thunder cerraba un plantel perfecto. Con una estrella estelar que atrae todos los flashes pero es perfil bajo fuera de las canchas, no hace escándalos como Shai Gilgeous Alexander, escoltado por una de las nuevas figuras como Chet Holmgren, un anotador increíble como Jalen Williams y un rendidor jugador, con puntos en la mano como Lu Dort. Tanto Caruso como Hartenstein demostraron que fueron los fichajes justos en el momento indicado.