Especial

LeBron a Krzyzewski, por Kobe, en 2008: "Mejor controla a ese hijo de puta"

08:40 18/02/2022 | Acaba de salir el libro Coach K, una biografía sobre Mike Krzyzewski, el DT de Estados Unidos desde el 2006 al 2016. Y esta anécdota es única.

Bryant, LeBron y Krzyzewski

Ian O'Connor es uno de los periodistas deportivos escritos más conocidos de los Estados Unidos. Autor de 4 libros sobre distintos personajes del deporte, acaba de sacar Coach K, la biografía de Mike Krzyzewski, el mítico entrenador de la Universidad de Duke de 74 años, que se retirará de la actividad con los Blue Devils cuando termine esta temporada. Además, dirigió a la selección de Estados Unidos en dos períodos: el Mundial de Argentina en 1990 (bronce) y a las selecciones del 2006 al 2016 que lograron 3 oros olímpicos y 2 oros mundiales, perdiendo solamente 1 partido en todo ese período. 

En este informe nos centraremos en una sola anécdota, que hace imaginar lo que debe ser el libro completo. Y cuenta cuando Coach K armó el equipo para ir a Beijing 2008, convocando a la mayoría de las estrellas de la NBA de entonces, incluidos Kobe Bryant, Dwight Howard, Jason Kidd, Carmelo Anthony, Chris Paul y LeBron James, entre otros. 

Varios lo habían tenido ya como coach en el Mundial 2006 (LeBron, por ejemplo), pero en general había una duda en el ambiente sobre si megaestrellas como el propio James o Kobe respetarían a un entrenador universitario. Sobre todo estos dos personajes, que nunca habían jugado en la NCAA. Mr K había tenido un cruce con LeBron en Japón 2006 por indicarle que debía respetar el código de vestimenta de la selección de EEUU (LeBron tenía 21 años ahí), algo que no le cayó bien y que luego el coach modificó. Kobe, en cambio, había declarado alguna vez que de haber ido a la NCAA lo hubiese hecho en Duke, y también empujó alguna vez para que el entrenador fuera a los Lakers, algo que nunca sucedió. 

Cuenta el libro que Krzyzewski, maestro en el manejo de las relaciones humanas, antes de los de Las Vegas, juntó a todos los jugadores para que dijeran lo que pensaban. Se lo comentó antes a LeBron: "Voy a preguntarle a todos para que me digan sus pensamientos y sensaciones. Y necesito que tú digas algunas palabras", a lo que LeBron contestó: "Ningún problema. Estás cubierto".

Entonces se hizo la reunión. Krzyzewski la inició con un típico discurso brillante para comprometerlos. Kobe tomó la palabra y dijo: "Coach, yo voy a hacer todo lo que usted quiera. Si quiere que tome el último tiro, lo haré. Si quiere que defienda al mejor rival, lo haré". El problema es que pasaba el tiempo y LeBron no hablaba. Se balanceaba en su silla sin intenciones de abrir la boca. Los que lo conocen dicen que no se animaba a decir nada siendo que no tenía ningún título en la NBA o internacional que lo avalara. Pero cuando parecía que no lo haría, dijo unas palabras y lo hizo muy bien. "¿Cuántas veces uno ha dicho, me encantaría tener a a Chris Paul en mi media cancha, me encantaría tener a Dwight Howard conmigo, o a Jason Kidd? Bueno, adivinen qué. Tengo a Paul, tengo a Howard y tengo a Kidd. Es lo que siempre quise. Así que no hay ninguna puta excusa". 

El clima era bueno, pero el 5 de agosto, en el último amistoso antes de viajar a China, en Las Vegas, cuando se enfrentaron a Australia, algo pasó. Todos venían compartiendo liderazgo, tiros y protagonismo sin demasiados problemas, pero ese día, pareció que Kobe estaba aburrido. Y en la segunda mitad, cuando Australia llegó a ponerse a 7, tiró un par de tiros fuera de lugar. Fue entonces que llegó la frase del título. LeBron se acercó a Coach K y le tiró, sin necesidad de nombrarlo: "Ey coach, más vale que controles a ese hijo de puta". 

Krzyzewski le dijo a LeBron que hablaría con Kobe y le pidió que confiara en él. El cuerpo técnico se reunió durante la noche. Esta vez solo hablaron de cómo manejar a Kobe. A la mañana siguiente, Mr K le pidió a Kobe juntarse. Con una computadora, le mostró situaciones del partido y le dijo: "Esos fueron tiros de mieda". Simultáneamente, su respiración se paró. Estaba absolutamente nervioso por la respuesta de Bryant. Entonces Kobe le dijo: "Lo entiendo coach, no te preocupes por eso. Lo lamento".

Lo que viene es bien sabido. Krzyzewski le dijo a James que había hablado con Kobe y eso generó un viaje a China relajado. Allí, hicieron estragos y ganaron probablemente la mejor final olímpica de la historia, 118-107 a España, con 27 puntos de Dwyane Wade, 20 de Bryant y 14 de James. Fue el primero de los tres oros olímpicos de Mr K con EEUU. Y la experiencia más grandiosa de su vida.

Fuente: 
SI.com

Compartir